18° BARS: Mirada de Cristal de Ezequiel Endelman y Leandro Montejano (2017)
Es realmente difícil encontrar en este tipo de festivales películas que no exuden ese amor por el cine de género, lo que sí suele costar es toparse con propuestas que combinen su pasión con un criterio cinematográfico y una técnica destacable. Afortunadamente el dúo de directores Ezequiel Endelman y Leandro Montejano saben exactamente lo que deben hacer: visten a la audiencia de giallo, la peinan a lo glam de los ’80 e iluminan sus sintetizadores con luces de neón. En el aniversario de la violenta muerte de una de las modelos más importantes del país, uno a uno los miembros de la revista que se disponía a rendirle homenaje irán desapareciendo, víctimas de una misteriosa figura femenina vestida de negro.
«Mirada de Cristal» es un homenaje al cine de terror italiano en el que se destacan las ganas de jugar dentro reglas con las que todos (en mayor o menor medida) estamos familiarizados, entregando una estructura estética que, en lugar de limitar, termina por acentuar todo aspecto del film. Los trabajos de arte y diseño logran darle un inmenso valor de producción a una obra nacional con presupuesto limitado y, junto a la dirección de fotografía, terminan de encuadrar un fiel retrato del terror europeo de culto. No es nada usual encontrar películas realizadas independientemente con una visión y estética tan clara como cuidada. A los gritos de sus actrices se le suma una excelente banda sonora realizada por Pablo Fuu, que le otorga a la cinta todo el ritmo y color que uno podría desear de este tipo de films. Aparte del vestuario, maquillaje y el trabajo impecable en todos los sets, se destaca la elección de planos y el cuidado en el montaje para mantenerse fiel a la historia del género al mismo tiempo que transmite una trama con personalidad propia y acento argentino. Definitivamente una experiencia que gana muchisimo al disfrutarse en una sala de cine, como bien le permitió este Buenos Aires Rojo Sangre al igual que el pasado Festival de Mar del Plata.
Se trata de una propuesta que encantará a cualquiera que tenga las ganas de adentrarse en un género que se resiste a morir, y aún cuando el giallo sea históricamente una experiencia para pocos, «Mirada de Cristal» hace lo suyo para ganarse a cualquier desprevenido. Divertida, entretenida y admirable al punto de merecer celebración, propone pasar una noche única en una sala de cine argentino.
«Mirada de Cristal» forma parte de la Competencia Iberoamericana en el 18° Buenos Aires Rojo Sangre.
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