Crítica de «Five Nights at Freddy’s 2» de Emma Tammi (2025)
Tras el éxito comercial de la primera entrega, recaudando más de 297 millones de dólares a nivel mundial con un presupuesto de 20 millones, llega la secuela de «Five Nights at Freddy’s», la saga inspirada en el famoso videojuego.
Era de esperar que la película más taquillera de la productora Blumhouse tenga una segunda parte, incluso cuando la crítica no acompañó demasiado al largometraje dirigido por Emma Tammi. La primera entrega enfrentó el desafío de llevar a la pantalla grande un juego de terror con una narrativa esquemática. La historia original se limitaba a un guardia de seguridad en una pizzería abandonada que debía sobrevivir varias noches mientras los animatronics cobraban vida, lo que generó comparaciones inevitables y ciertas limitaciones a la hora de adaptarlo. Dos años después, la productora de Jason Blum busca replicar el éxito de la original tras un año para el olvido, el cual implica el fracaso de películas como «Wolf Man» y principalmente de «M3GAN 2.0» que contó con un presupuesto más abultado de lo que acostumbran sus producciones. Con la aparente levantada que impulsó «El Teléfono Negro 2», resta esperar si «Five Nights at Freddy’s 2» puede revertir el mal semestre que venían teniendo o si confirman la tendencia inicial.
La segunda parte vuelve a ser dirigida por Emma Tammi y tiene lugar un año después de los acontecimientos del primer film. La historia de lo que ocurrió en la pizzería de Freddy Fazbear adquirió el status de leyenda local haciendo que los adolescentes del lugar se obsesionen con aquella pesadilla que tuvo que atravesar Mike (Josh Hutcherson), su pequeña hermana Abby (Piper Rubio) y Vanessa (Elizabeth Lail), la agente de policía local relacionada en el caso más cerca de lo que ellos creen. Aparentemente, está a punto de tener lugar el primer «Fazfest», lo cual tiene realmente al borde del ataque de pánico a Mike y a Vanessa, quienes han decidido no contarle del todo a Abby lo que aconteció aquella fatídica noche. No obstante, cuando la pequeña de 11 años intente averiguar sobre el destino de sus «amigos animatronics», una nueva ola de sucesos aterradores y sangrientos tendrá lugar nuevamente, revelando oscuros secretos del origen de Freddy’s y trayendo a la vida a nuevos y escalofriantes personajes.
A diferencia de su predecesora, esta secuela intenta agrandar el legado y profundizar en el lore construido por los videojuegos, al mismo tiempo que busca crear un escenario propicio para dar rienda suelta a los sustos y al terror un poco más convencional. Si bien uno agradece que la producción haya optado por volver a un estilo más analógico y no tan digital como vienen eligiendo la mayoría de las películas de terror contemporáneas, el film sigue sufriendo en la falta de una historia sólida y unos protagonistas que generen identificación dentro del público. Cabe destacar que mientras la primera se veía un poco más para iniciar a los niños en el terror, siendo un poco más naif y «amable», esta entrega cuenta con un espíritu un poco más adolescente, incurriendo en momentos más terroríficos y originales que servirán para que los púberes sigan adentrándose en los caminos del cine de género (y si esta saga sirve para eso, al menos ya cumplió una función bastante grande).
Aquellos que busquen algo innovador, no lo encontrarán. El largometraje está más preocupado en preparar todo para una potencial tercera parte que en adentrarse en las vidas de los personajes y resolver sus conflictos personales.
«Five Nights At Freddy’s 2» resulta ser una película entretenida que cuenta con algunos buenos pasajes, un diseño de producción sólido y una historia que se ubica apenas un escalón por sobre su antecesora. Aun así, resulta muy difícil no verle los hilos y su aspiración a seguir perpetuándose en el tiempo solamente por cuestiones económicas.
Puntaje:
Tráiler:
Martín Goniondzki
