FESTIVALES

20° BAFICI: “Don’t forget me” de Ram Nehari (2017)

“Don’t forget me” es una película israelí que cuenta la historia de Tom, una chica con un trastorno alimenticio por el cual está internada en una clínica psiquiátrica. En una visita casual conocerá a Neil, un chico nacido en Holanda pero que también vive allí y toca la tuba, con el deseo de irse a una gira por Europa. Este encuentro generará una cierta vitalidad para ambos personajes que están al borde del abismo.

Enmarcada en el género de la comedia dramática, “Don’t forget me” trata temáticas fuertes como las enfermedades físicas y mentales y la forma en la que los personajes abordan la vida y coquetean con la muerte. Si bien no observamos un film lacrimógeno o con golpes bajos, se acerca más al drama que a la comedia con algunas escenas escatológicas pero reales. No son muchos los gags que aparecen y son pocos los momentos en los que nos provoca gracia. Se utiliza más la ironía para retratar ciertas situaciones y es allí donde se pueden esbozar algunas sonrisas.

Con su hora y media de duración, la trama se siente como si le faltara explorar un poco más la vida de los protagonistas. No conocemos mucho sobre cómo llegó cada uno a su situación actual ni conseguimos ver una posible solución a futuro. La película se centra únicamente en el vínculo de estos personajes que se aíslan por un instante de su realidad para pasar un buen tiempo juntos. La cinta busca mostrar un halo de esperanza relacionando a estas dos personas conflictuadas, pero que encuentran en el otro un motivo para salir adelante. A favor podemos decir que la presentación de Tom y del lugar en el cual se encuentra internada es exhaustiva, pero no se le otorga el mismo tratamiento al resto del relato. Se toman mucho tiempo para definir a los personajes y después su relación no se aprovecha del todo.

Uno de los puntos más fuertes del film es el trabajo actoral de Nitai Gvirtz (también guionista de la película), quien compone un papel aislado y soñador, y Moon Shavit, que encarna a Tom con una gran naturalidad, acidez y falta de realidad. Ambos protagonistas logran generar una química que se da en el poco tiempo que tienen juntos. Y al ser una película de personajes, es importante que el relato se sostenga a partir de sus interpretaciones.

En síntesis, “Don’t forget me” es una película israelí que se propone abordar un momento en la historia de sus personajes, quienes padecen distintas enfermedades mentales, a través de un humor negro e irónico que no termina de cerrar del todo. El film no busca contar el antes ni el después de estos protagonistas, sino el vínculo que logran conformar en un corto lapso temporal, pero que significa un eje central en la vida de cada uno de ellos.

Se puede ver “Don’t forget me” el sábado 21 a las 21 hs en el Village Recoleta.

Puntaje: 

Tráiler:

 

Samantha Schuster

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *