40° MDQ Film Fest: «Nouvelle Vague» de Richard Linklater (2025)
El director norteamericano responsable de películas como la trilogía de «Antes del amanecer» (1995 – 2013), «Escuela de rock» (2003), «Boyhood «(2013) y «Cómplices del engaño» (2023) se mete de lleno en la cinefilia y el cine que dialoga con su propia historia en «Nouvelle Vague», una película que describe el proceso de filmación de «Sin Aliento» (1960), la ópera prima de Jean-Luc Godard y uno de los exponentes más grandes de la vanguardia de la nueva ola del cine francés.
Para aquellos que no estén familiarizados con la Nouvelle Vague, esta fue una vanguardia cinematográfica o movimiento artístico que nació como una respuesta frente a las normas y fórmulas del cine comercial de la época. El término fue acuñado por la crítica, en particular por la revista Cahiers du Cinéma, para referirse a una generación de cineastas franceses que apareció a fines de los ‘50 y duró hasta finales de la siguiente década. Muchos de esos cineastas fueron críticos de la revista y entre sus integrantes podemos destacar a André Bazin, François Truffaut, Agnès Varda, Jean-Luc Godard, Jacques Rivette, Éric Rohmer, Alain Resnais y Claude Chabrol. Estos directores defendían, por encima de todo, la libertad creativa y técnica en la realización cinematográfica.
La película de Linklater representa una carta de amor a una forma de hacer cine, a un director emblemático y toda una generación que supo inscribirse en los libros de historia. Para ello, el autor emula a la vanguardia a través de una relación de aspecto de 1,37:1, un blanco y negro con una textura de fílmico característica y una recreación de época excelsa desde el diseño de producción, el vestuario y la caracterización de los personajes (la presentación de los mismos cual documental con los nombres abajo, le dota cierto cualidad estética que resulta atractiva).
Uno de los grandes aciertos del film residen en la decisión de que la historia esté hablada casi enteramente en francés, haciendo que ese envoltorio de making of o registro documental tenga esa sensación de cinéma vérité que contribuye a la construcción que busca Linklater. Por otro lado, la idea de reconstruir los intercambios de Godard con sus colegas mostrando sus excentricidades y su peculiar forma de ver a la dirección cinematográfica es otro de los puntos fuertes. Se muestra todo su ingenio y cómo los demás no podían comprender el método revolucionario que estaba erigiendo a través de su ópera prima, dando pie a momentos hilarantes y risueños donde se permite el lucimiento de Guillaume Marbeck (extraordinaria composición de Godard), Aubrey Dullin (un calco de Jean-Paul Belmondo, Zoey Deutch (gran trabajo como Jean Seberg), Bruno Dreyfursft como el productor Georges de Beauregard, y Matthieu Penchinat como el director de fotografía Raoul Coutard.
«Nouvelle Vague» es una película que demuestra un profundo amor al cine como medio de expresión, como arte y como oficio. Linklater se permite algunas licencias con el fin de alimentar la leyenda. Esto le juega a favor para promover la comedia (mostrando el genio detrás de Godard, pero también la ambición desmedida y los caprichos del artista) y para atraer al público que quizás no esté tan atento a los detalles y las especificidades históricas. Una película luminosa, un canto a la cinefilia y una revalorización de la concepción artesanal del séptimo arte.
Puntaje:
Tráiler:
Martín Goniondzki

