«Black Bird», cómo acceder a la confesión de un asesino

Las historias sobre asesinos seriales siempre llaman la atención por su cinismo y porque queremos tratar de entender qué le pasa a una persona por su mente para cometer todo tipo de atrocidades. Esto provoca que sea uno de los productos que el público más busca. El año pasado se estrenó en Apple TV+ «Black Bird», una miniserie de seis episodios inspirada en hechos reales que logró posicionarse como una de las mejores producciones de 2022.

Todo comienza cuando el futbolista estrella de la secundaria, hijo de policía condecorado y traficante de drogas Jimmy Keene (Taron Egerton) es sentenciado a 10 años de prisión. Es así como delante de él tiene dos opciones: quedarse donde está y cumplir su sentencia completa sin opción de libertad condicional o aceptar un acuerdo y entrar en una cárcel de máxima seguridad para hacerse amigo del presunto asesino en serie Larry Hall (Paul Walter Hauser). Keene se dará cuenta de que su única forma de sobrevivir a aquel lugar es conseguir esa confesión que tanto espera la policía antes de que se apruebe la apelación de Hall y este pueda salir en libertad.

«Black Bird» es una miniserie intensa que se toma su tiempo para desarrollar a los protagonistas, sus cualidades principales y el vínculo que se va construyendo entre ellos, donde cada vez se van haciendo más y más cómplices pero que también va variando según el día y las confesiones de cada uno. Tenemos largos diálogos en donde se profundizan diferentes cuestiones, como las relaciones amorosas, el sexo, el trato hacia el género opuesto, la familia, entre otras cosas, donde podemos ver el punto de vista y los pensamientos de cada uno de ellos.

Además, existe un halo de misterio constante sobre el caso. Se pone en duda si Larry cometió los hechos de los cuales se lo acusa o si simplemente es un charlatán en busca de atención. Sin embargo, a medida que pasan los capítulos todo va quedando más claro y no existen los grises a la hora de juzgar al bien y al mal.

Pero no solo nos centramos en los protagonistas de esta historia y en cómo va avanzando su vínculo, sino que también tenemos algunos flashbacks sobre la investigación y en cómo los detectives van descubriendo pruebas o llegando a callejones sin salida; se muestra la vida en una cárcel de máxima seguridad y se ahonda un poco en la relación que cada uno tiene con su familia. Esto no solo nos permite conocer más a fondo a los personajes y por qué son cómo son, sino que también le brinda un poco más de background y volumen a la historia para que no sea tan lineal, monótona o corta.

Más allá de la historia escalofriante, gran parte del mérito para que esta serie funcione es el trabajo de sus protagonistas para componer a estos delincuentes. Paul Walter Hauser es un gran actor y lo pudo demostrar en distintas producciones como en «Richard Jewell», pero acá lo que hace es descomunal y probablemente estemos ante su mejor trabajo. Transforma su voz, su actitud y su mirada en pos de convertirse en este asesino serial tan sumiso como demente y peligroso, manejando muy bien esa mezcla entre la inocencia y la culpabilidad. Es creíble y nos pone la piel de gallina con sus relatos. Por su parte, Taron Egerton interpreta a un joven canchero y valiente que pone su vida en juego. Se nota cómo se va transformando a medida que conoce los distintos detalles del caso y va teniendo más contacto con el asesino. Además, se complementan muy bien entre sí y podemos sentir esa tensión cada vez que están juntos.

Además, si vemos las imágenes reales del caso podemos darnos cuenta que los protagonistas son muy parecidos a las personas verdaderas, agregando credibilidad al asunto. Lo mismo ocurre con la reconstrucción de la cárcel, donde podemos sentir el clima opresivo y tensionante por todos los peligros que tiene que atravesar el personaje de Egerton.

En síntesis, «Black Bird» es de esas series pesadas, intrigantes y fuertes sobre un hecho de la realidad que está muy bien plasmado por sus protagonistas y el mundo que construyeron a su alrededor. A pesar de tener capítulos de alrededor de una hora de duración, están muy bien llevados a cabo porque nos atrapan con el relato y el vínculo que van desarrollando. Para no perdérsela.

Tráiler:

 

Samantha Schuster

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