Los droides más queridos de “Star Wars”

Al principio tuvimos a Luke, Leia y Han Solo, ahora se sumaron Rey, Finn, Poe y Jyn Erso, entre otros de los protagonistas que desde un comienzo nos cautivaron en todo el universo de “Star Wars”. Sin embargo, existen personajes secundarios, cuya intervención e interacción tiene un papel más pequeño pero vital para la Galaxia. Se trata de los droides, acompañantes fieles de los humanos, y que aprendimos a querer rápidamente.

Los droides (abreviatura de androide) son seres mecánicos que poseen inteligencia artificial. Son utilizados para distintas acciones, sobre todo en ambientes donde los humanos no pueden llegar por diferentes motivos, tanto por su espacio como por su peligrosidad.

De acuerdo con el objetivo por el cual fueron creados, existe una clasificación de los droides: los especializados en ciencias físicas, matemáticas y médicas; en ciencias técnicas e ingeniería; en ciencias sociales y áreas de servicio, como traducción, asistencia diplomática y tutoría; en seguridad y aplicaciones militares; o aptos para tareas como la minería, el transporte o la sanidad.

R2D2, por ejemplo, es uno de los famosos droides astromecánicos, que sirvió fielmente a la familia Skywalker por muchos años. A pesar de tener varios aparatos especializados, R2D2 siempre fue bueno para tomar la iniciativa y embarcarse en misiones tan altruistas como peligrosas para ayudar a sus amigos.

En “Star Wars: The Force Awakens” apareció otro droide astromecánico, que se llevó los suspiros y las risas de todos los espectadores. BB-8 es el fiel compañero de Poe Dameron, quien lo acompañó durante varias misiones en la Resistencia, ayudándolo a reparar su X-Wing cuando la nave tenía algún problema técnico.

Si bien ambos droides no pueden hablar, se comunican mediante sonidos, cuyos amos interpretan a la perfección. Son fieles compañeros y lograron salvar unas cuantas misiones gracias a sus grandes capacidades.

Por otro lado tenemos a C3PO, a quien conocimos al mismo tiempo que a R2D2. A diferencia de los droides nombrados con anterioridad, éste sí mantiene una interacción con los humanos, debido a su función de protocolo. De hecho, siempre se caracterizó por hablar un poco mucho, ya que presenta más de seis millones de formas de comunicación. Además, a diferencia de su amigo R2D2, C3PO nunca fue osado y ávido de las grandes aventuras, sino que siempre fue la voz de la razón y de la conciencia, preocupándose por todo lo que ocurría a su alrededor.

También el lado oscuro de la Galaxia tiene sus droides, pero particularmente en “Rogue One” pudimos conocer a uno que fue reprogramado para ser parte de los Rebeldes, aunque en apariencia permaneció igual. K-2SO es un agente efectivo que, por lucir igual que los droides imperiales, pudo infiltrarse sin problemas en varias misiones. Pero lo más atractivo de K-2SO es su falta de filtro, que le hace decir todo lo que se le pasa por la cabeza, sin darse cuenta que puede herir o molestar a alguien, generando las escenas más divertidas del spin-off.

“Star Wars” se caracteriza por tener personajes maravillosos, cuyas características le otorgan un toque especial a la historia. No podemos dejar de lado a los humanos ni a los humanoides, como a los Wookiee (Chewbacca, otro gran personaje con un corazón enorme que, con solo la emisión de sonidos, expresaba mucho más que cualquier persona), pero acá decidimos rendirle un pequeño homenaje a esos seres artificiales que siempre se encontraron fieles a sus amos y ayudaron en todo momento, como lo son los droides. Vamos a ver si en «Star Wars: The Last Jedi» se realiza una nueva incorporación.

 

Samantha Schuster

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