«Supongamos que Nueva York es una ciudad»: Fascinante retrato de la Gran Manzana a través de los ojos de la talentosa Fran Lebowitz
El mítico director Martin Scorsese produce y dirige esta interesantísima miniserie de Netflix donde vuelve a rendirle homenaje a la ciudad de Nueva York y a la figura de la irónica escritora, humorista y contadora de anécdotas Fran Lebowitz.
Todo el mundo cree conocer lo que significa la ciudad de Nueva York, o al menos tiene una idea que viene dada de la cultura popular, del cine y de tantos temas que trascienden la mera cuestión geográfica. Lo cierto es que probablemente nadie conozca o tenga tan arraigado el sentido de pertenencia a ese lugar como Fran Lebowitz. La escritora oriunda de New Jersey se trasladó a NY a los 18 años y ha residido desde entonces en «la ciudad que nunca duerme». Más de 50 años lleva viviendo allí y cree comprender cómo fueron dándose una enorme cantidad de cambios socioculturales y económicos desde la década de los 70 hasta la actualidad. Es por ello y por su sagaz visión como humorista y escritora que «Pretend It’s a City» (nombre original de la miniserie) comprende una grata y cautivadora experiencia, porque escuchar a la Fran de 70 años ir hablando y prestando testimonio del astronómico crecimiento exponencial de la ciudad y a su vez dando su punto de vista de la metrópoli pre y post Rudolph Giuliani y hasta estos días, es algo que solo se puede conseguir con la sabiduría que se obtiene de la experiencia y el paso del tiempo. Además, ella se encuentra muy bien acompañada ya que Scorsese es otro de los pocos artistas que supieron retratar y capturar tanto la magia como las miserias del lugar por medio de sus relatos.
Los 7 episodios de treinta minutos de duración, se van dividiendo en diferentes tópicos que van desde los cambios en la infraestructura, hasta el tránsito, los bienes raíces y demás elementos que hacen a cualquier gran urbe; todos atravesados por hilarantes y perspicaces comentarios de la protagonista que yuxtaponen anécdotas propias y análisis pertinentes. Fran cuenta su experiencia particular en la que llegó a trabajar limpiando casas y manejando un taxi, todo en función de evitar caer en el típico empleo de camarera en bares, ya que no quería que la acosaran los empleadores.
El poder de oratoria y verborragia de la autora es realmente envidiable y se la puede notar bastante cómoda con la modalidad documental de la serie que alterna entre entrevistas privadas con Marty y algunas apariciones en público de las tantas que realiza en NY en pequeños espacios.
Cabe destacar que no es la primera colaboración entre ambos, ya que el director le había dedicado un largometraje documental en 2010, titulado «Public Speaking» para la señal de HBO, el cual iba por un camino similar al de esta producción. Asimismo, Lebowitz tuvo una pequeña participación en «The Wolf of Wallstreet» (2013).
Fran es una figura enigmática, brillante, neurótica y sumamente mordaz y elocuente que parece por momentos un personaje de Woody Allen o Larry David, y cuyas reflexiones son tan profundas como subjetivas y cargadas de hipocondría.
«Supongamos que Nueva York es una ciudad» comprende una gran miniserie documental que se beneficia de esa intimidad y sinceridad producto de la amistad de Scorsese y Lebowitz, así como también de esas atractivas anécdotas y la sagacidad con la que analizan la ciudad que marcó sus respectivas vidas.
Tráiler:
Martín Goniondzki
