“Better Call Saul”: ¿Es la cuarta temporada la mejor hasta el momento?
Desde que se estrenó “Better Call Saul”, el spin-off de “Breaking Bad”, la mayoría de los espectadores vio en ella a una digna sucesora de la serie madre. Pero si bien se podía notar la calidad del producto y teníamos algunas líneas argumentales interesantes, unos planos perfectamente pensados y ejecutados, y algunos momentos espectaculares, se sentía como que la historia de Jimmy no terminaba de explotar. Era un constante avance y retroceso de su personalidad y, sobre todo, de su relación con su hermano Chuck. Pero sacando de la ecuación a este personaje, la cuarta temporada nos otorgó todo lo que esperábamos.
Esta nueva entrega de “Better Call Saul” retoma los sucesos ocurridos en el final de temporada, donde Chuck perece en un incendio, y genera en Jimmy un sentimiento liberador, por el cual podrá seguir su camino sin culpas ni responsabilidades de tener que cuidar a un hermano mayor con una enfermedad y que continuamente lo vivía rechazando. Es así como comenzamos a ver fehacientemente una transformación en la personalidad del protagonista. Ya no nos tenemos que conformar con buenas líneas argumentales de personajes secundarios como Mike, Nacho o Gus, ni esperar que vuelvan caras conocidas de “Breaking Bad”, ahora la serie consiguió un nivel de gran calidad que logra sostenerse por sí sola, con un protagonista con peso propio. Jimmy empieza a transitar ese camino por el cual lo conocimos anteriormente, atrapando completamente al espectador.
En cada capítulo tenemos historias atractivas para ser contadas, desde Jimmy rebuscándoselas para sobrellevar el tiempo y una vida más o menos acomodada hasta que pueda volver a ejercer como abogado, hasta Mike y Gus empezando a crear el laboratorio de metanfetamina, la evolución de Héctor Salamanca y la vida laboral de Kim, un personaje que cobró una gran importancia en esta temporada y que no se conforma con haber conseguido un gran cliente, sino que se preocupa más por hacer otras cosas y tener una carrera más dinámica y picante. Su relación con Jimmy es muy especial y es un placer ver esos planes que idean con un objetivo puntual en mente.
Si bien dijimos que no hizo falta una figura importante de “Breaking Bad” para resaltar alguna historia durante esta temporada, sí tuvimos algunas incorporaciones de menor magnitud pero igual de importantes, como Huell, el hombre de seguridad de Jimmy, (a quien habíamos visto en un par de ocasiones) o Lalo, a quien en realidad no conocimos, pero fue el encargado de presentarle a Saul a Walt y Jesse. Tal vez no modifican la trama, pero acompañan a armar el contexto de lo que fue la serie madre, y profundiza un poco más acerca de sus vidas que no conocíamos. Incluso este último personaje seguramente tendrá un rol central a futuro, algo que se pudo ver sobre todo en el último capítulo.
Con respecto a los aspectos técnicos no tenemos más que elogios para mencionar. No solo Vince Gilligan propone puestas de cámara excéntricas u originales, sino que en varias oportunidades la introducción del episodio es una verdadera maravilla. Secuencias paralelas de personajes, montajes, música que acompaña de una forma perfecta y acciones que recién más entrado el capítulo vamos a poder entender.
Por todas estas cuestiones podemos afirmar que la cuarta temporada de “Better Call Saul” es la mejor hasta el momento, porque finalmente logró tomar vuelo y realizar esa explosión que tanto esperábamos. Tal vez algunos ya lo percibían antes o les gustaba de todas formas, pero para aquellos que sentían que veían una serie solo porque sabían que en alguna oportunidad iba a llegar a un nivel de excelencia, ese momento ya llegó y ahora solo queda disfrutar.
Tráiler:
Samantha Schuster
