Crítica de «Blue Beetle» de Angel Manuel Soto (2023)
Pasa algo peculiar con «Blue Beetle» a diferencia de otras películas tanto de DC como de Marvel. Y es que tiene elementos como para ser algo realmente diferente a otros relatos del género que, a este punto, ya no le atrae ni les resulta llamativo a los más ávidos consumidores de estos productos. Ahora bien, todas esas cuestiones son descartadas inmediatamente en pos de contar una historia arquetípica, llena de lugares comunes que no son suficientes para sorprender ni tampoco utiliza las características de su personaje protagónico de una forma novedosa como para que verdaderamente resulten atractivos.
Podría definirse a la película dirigida por Ángel Manuel Soto («Twelve» -2020-) como un film fuera de época. Quizás si la misma se hubiese estrenado en la primera década de los 2000 o ni bien comenzada la «edad dorada» del género, probablemente hubiese tenido otro tipo de repercusión tanto en taquilla como en crítica.
El largometraje cuenta la historia de Jaime Reyes (Xolo Maridueña), un muchacho de origen mexicano que vuelve a su casa ubicada en la ciudad ficticia de Palmera City, Texas, luego de culminar sus estudios en la universidad. Su familia y su hogar ha cambiado bastante desde que él se fue y todos deberán afrontar severos problemas económicos. En medio de este panorama extraño para Jaime, aparecerá la despiadada CEO de Kord Industries, Victoria Kord (Susan Sarandon), que anda en la búsqueda de una extraña reliquia alienígena: el escarabajo. Con dicha reliquia conseguiría ampliar su enorme colección de armamento y aumentar las ventas de su empresa, pero como es de esperarse dicha reliquia cae en manos de Jaime cuando Jenny Kord (Bruna Marquezine) se la roba a su tía. Cuando el escarabajo elige a Jaime como huésped simbiótico, éste recibe una increíble armadura con poderes extraordinarios e impredecibles que cambiarán para siempre su vida y la de sus seres queridos.
Más allá de que el personaje está basado en los comics, la realidad es que «Blue Bettle» sigue a rajatabla el modelo de «película de inicio» de superhéroe planteada por Sam Raimi en “El Hombre Araña” (2002) y que Marvel copió o tomó como modelo base para todos los relatos que conformarían en MCU concebido por Kevin Feige y compañía. De hecho, «Blue Beetle» también guarda ciertos rasgos de «Spiderman» y de «Iron Man» (2008), con el cual comparte otras cuestiones tanto a nivel argumental como estructural en lo que respecta a narrativa del film. Es por ello que parece algo ya visto, conocido y que no guarda sorpresas para el espectador.
Los rasgos distintivos del personaje son principalmente dos. Uno recae en el vínculo fuerte que posee con su familia, de hecho, no ocultar su alter ego sino compartirlo con ellos y que los mismos formen parte de la acción puede que sea algo atractivo. Y el otro es su origen latino, pero lamentablemente esto no está del todo bien desarrollado, ya que parecen mezclar diversos elementos de varias culturas latinas de una forma superficial como si los países latinos fueran todos iguales y tuvieran la misma idiosincrasia (se hacen algunas referencias a la cultura mexicana, se pone música de Puerto Rico y Argentina, etc).
Xolo Maridueña cumple en el rol protagónico y demuestra seguir en buena racha tras su paso por «Cobra Kai» (2018 – 2023), aunque tienda a sobreactuar en ciertas secuencias dramáticas. Por el lado del CGI, DC parece estar aprendiendo un poco de sus errores y aunque la película no sea del todo perfecta en esa área, sí que se nota una evolución en cuanto a su utilización, más si es que la comparamos con otras producciones de la compañía de este mismo año como «Flash» (2023).
En síntesis, «Blue Beetle» puede que tenga algunos pasajes entretenidos, aunque sufre de ser sumamente dependiente a la fórmula y a los clichés del género. Obviamente que el principal problema es que ya cruzamos la frontera del agotamiento de este tipo de producciones, pero, aun así, más allá del talento delante y detrás de cámara, cuesta encontrar motivos para sumergirse en su trama trillada.
Puntaje:
Tráiler:
Martín Goniondzki