Crítica de «Gunpowder Milkshake» de Navot Papushado (2021)

Sam (Karen Gillan) era pequeña cuando su madre (Lena Headey) tuvo que abandonarla porque su trabajo la obligó a huir de personas peligrosas que podían llegar a hacerle daño a ella o a su familia. Años más tarde, la joven termina siguiendo sus pasos y convirtiéndose en una asesina a sueldo bastante exitosa. Luego de perder el control en una misión, rescata a una niña de 8 años que estaba secuestrada y no tendrá más remedio que enfrentarse a sus antiguos compañeros de trabajo.

«Gunpowder Milkshake» es una película que se estrenó en USA en algunas salas y a través de la plataforma de Netflix, pero que al catálogo latinoamericano todavía no llegó porque la cinta pasaría primero por los cines este año, aunque todavía no hay fecha confirmada.

Con la variante de tener a una mujer como protagonista, a la que luego se le suma otro grupo de mujeres, por momentos «Gunpowder Milkshake» nos hace acordar a «John Wick», una de las películas más populares y mejores resueltas dentro del género de acción, que supo crear una fórmula y un universo superior en el cual basarse. A veces resulta un poco difícil no comparar a cualquier historia de venganza con este film pero acá por instantes se replica ese submundo criminal, el cual tiene sus propias reglas y recovecos en la ciudad para esconderse, como también emula el estilo de pelea, como el hecho de poder defenderse con cualquier objeto que esté al alcance.

De todas maneras, las coreografías están muy bien realizadas, recurriendo a creativas y logradas resoluciones, donde no se escatima en sangre y violencia. Esto genera sorpresa e impacto, a pesar de sentirse disparatado en algunos instantes. Además, el humor está presente en varias oportunidades para descontracturar un poco las escenas y brindarle mayor entretenimiento al público.

La película va de menor a mayor, creciendo a medida que avanza, resultando más entretenida, atractiva y dinámica cuando todos los personajes femeninos se reúnen en pantalla, más que cuando solo se enfoca en su protagonista. Además de Karen Gillian, que realiza un muy buen trabajo para ponerse en el rol de esta chica ruda, determinada y dispuesta a todo, pero también emocionalmente dañada por el abandono de su mamá, se le suman las actrices Lena Headey, quien encarna a su madre; y Angela Bassett, Carla Gugino y Michelle Yeoh como viejas amigas que la ayudarán en los momentos más difíciles. Todas presentan una fuerza potente y buena química en pantalla, haciendo que las escenas compartidas brillen aún más, a pesar de no tener un desarrollo profundo sobre sus personajes.

En síntesis, «Gunpowder Milkshake» resulta una entretenida película de acción liderada por mujeres, aunque por momentos nos recuerde a la lograda y popular John Wick por su estilo y construcción del mundo criminal. Con un gran talento delante de cámara y creativas e impactantes coreografías de pelea, podemos pasar un buen momento y prepararnos para lo que será su secuela que saldrá próximamente.

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Samantha Schuster