«Moon Knight», una historia superheroica que explora la salud mental

Disney y Marvel siguen haciendo rodar su maquinaria de producciones, no solamente en cines sino también en su plataforma de streaming que está cada vez más aceitada, con series bastante seguidas sobre personajes secundarios que merecían su historia individual. Ya tuvimos «WandaVision», «Falcón y el Soldado de Invierno», «Loki» y «Hawkeye», todos superhéroes a los que ya habíamos visto en pantalla grande, con algunas incorporaciones interesantes.

En esta oportunidad, y un poco lo que va a marcar el camino hacia el futuro de ambas compañías, con incorporaciones como «She-Hulk», entre otras, nos presentan un personaje nuevo con una historia que todavía se encuentra por fuera del MCU, bastante desconocida para el público que sigue solamente dichos films pero novedosa porque propone algo distinto. 

Es así como se estrenó «Moon Knight», la cual cuenta la historia de Steve, un empleado de un museo que lucha con un trastorno de identidad disociativo, que recibe los poderes del dios egipcio de la luna. Pronto, descubrirá que eso puede ser tanto una bendición como una maldición, cuando deba frenar la reencarnación de una diosa que puede juzgar los malos actos de los hombres antes de que ocurran. La misma tiene una duración de seis capítulos de menos de una hora y se puede ver por Disney+.

Durante los primeros episodios la serie nos proporcionó algo diferente, más oscuro, atractivo, resaltando principalmente al acercarse al género de aventura con condimentos de comedia y terror, pero que también presentaba un ritmo lento, con avances pocos certeros y algo de confusión en su ejecución. Sin embargo, a partir del cuarto episodio da un giro totalmente inesperado e impactante, que hace que la historia se vuelva todavía más interesante, porque empieza a ahondar en la psiquis humana y las enfermedades mentales. Hacia el final, la confusión vuelve a estar presente, mareando un poco al espectador con tantas idas y vueltas de los personajes.

Este abordaje encuentra también un antecedente en «WandaVision», donde se exploraron los sentimientos de pérdida y duelo, y cómo eso puede afectar a una persona, llevándola hasta límites insospechados y a dañar a los que más quiere. En este caso sigue por esa línea, pero a pesar de presentar algunas escenas crudas, no se vuelve demasiado dramática ni pierde el humor y el entretenimiento característico, sino todo lo contrario, utiliza este tema para brindar situaciones hilarantes.

Uno de sus puntos más altos es sin dudas la increíble doble actuación de Oscar Isaac, que compone a dos personajes totalmente opuestos, complementarios y complejos, no solo en cuanto a personalidades sino incluso cambiando el acento de norteamericano a inglés constantemente. Se nota no solo un esfuerzo interpretativo sino también físico y mental para llevar adelante este desafío que nos propone un superhéroe totalmente distinto a lo que acostumbramos ver. El resto del elenco se encuentra bien también, acompañando a los protagonistas, principalmente May Calamawy, que compone a Layla, compañera de Marc/Steve que se luce por su ingenio y fortaleza; y Ethan Hawk, que se pone en la piel del villano, convirtiéndose en un peligro real para los héroes.

Los aspectos técnicos son fundamentales en las series de este estilo. Acá están bastante logrados, aunque por momentos se nota demasiado el CGI o los efectos no están muy bien hechos, dando un aspecto artificial. Sin embargo, dentro de todo la ambientación de Egipto, los cambios de cuerpo y los traslados se sienten creíbles.

Con un final abierto a una posible pero no confirmada continuación y una futura adhesión al MCU, «Moon Knight» es una serie diferente a lo que venimos viendo de Disney/Marvel. Una historia más oscura, que consigue mezclar diversos géneros como la comedia, el drama y la aventura para ahondar en las enfermedades mentales desde un costado sombrío pero entretenido. Tarda un poco en arrancar pero desde el vamos nos engancha la gran interpretación de Oscar Isaac y el resto del elenco.

Tráiler:

 

Samantha Schuster