«The Outsider»: La oscura serie que, por fin, le hace justicia a Stephen King
Como seres racionales cuestionamos todo, analizamos todo, pero, ¿qué pasa cuando se nos presenta algo que agota toda explicación lógica? Aquello que hace que te preguntes y pienses en cuanto a la existencia de otro universo que convive entre nosotros.
En medio de lo sobrenatural, el realismo y lo inexplicable, se encuentra «The Outsider», una historia que atrapa desde el primer momento, que no decae ni decepciona ante su final.
Basada en la novela homónima de Stephen King lanzada en 2018 y adaptada para la pantalla chica por el guionista Richard Price («The Wire» o «The Night Of»), «The Outsider» es una miniserie inquietante de HBO, un típico drama policial que a medida que avance ya no será nada convencional. Tiene un poco de cercanía a «True Detective» y otros toques a lo M. Night Shyamalan. Consta de 10 capítulos de entre 50-60 minutos realmente perturbadores.
Todo comienza con un asesinato, el cuerpo de un chico de once años, Frankie Peterson, aparece mutilado en los bosques de Georgia con signos de haber sido sodomizado (la cámara muestra, aunque no juega con el morbo). El encargado de resolver el caso es Ralph Anderson (Ben Mendelsohn), el detective de una pequeña localidad donde todos saben todo de los demás. Las pistas parecen apuntar a Terry Maitland (Jason Bateman), maestro y entrenador de béisbol, querido y muy respetado por sus amigos y vecinos. La escena del crimen, la camioneta donde transportaron a Frankie Peterson está llena de sus huellas. Por un lado, la evidencia lo incrimina, pero otras contradicciones generan dudas, llegando a la pregunta ¿cómo es posible que un hombre esté en dos escenarios diferentes al mismo tiempo?.
Esta es la premisa que flota en el aire durante los dos primeros episodios de «The Outsider», para posteriormente ampliarse el suspenso, las dudas y confusiones.
Cada episodio crea un clima de suspenso y tensión que no deja de avanzar sobre la trama, pero que también se toma el tiempo necesario para sumergirse en los conflictivos presentes de los protagonistas. Solo oscuridad y misterio es lo que entrega la serie, un tira y afloje de poca información por capítulo. La importancia de la atmósfera es fundamental junto al ritmo pausado pero tenso que va incorporando elementos de carácter sobrenatural que terminan por envolver toda la trama en un halo de misterio terrorífico, dándole un sentido distinto y más abstracto que se aleja de la típica búsqueda del psicópata de turno.
Anderson, un Mendelsohn más arraigado a lo usual, es corrido de su acostumbrado registro de villanos, quien carga con sus propias tragedias personales que no terminan de sanar. Por eso el caso de Maitland lo descoloca y lo obliga a involucrarse más de la cuenta. Un personaje interesante que de forma muy delicada y de a poco va evolucionando mientras se encuentra en un tire y afloje durante su transición. Tras sospechas y no encontrar una lógica, la llegada de Holly Gibney (Cynthia Erivo), una especie de «detective privada», especialista en lo inexplicable y estrechamente ligada al mundo de lo sobrenatural, suma en la transformación de Anderson y sus cuestionamientos personales para tratar de resolver el caso. Se descubre que el asesino es una fuerza sobrenatural que puede cambiar de formas, e intentarán buscar una forma de detenerlo.
Los climas oscuros en un ambiente de suspenso refuerzan una narrativa visual muy bien llevada, la solvencia de la construcción del relato la hacen realmente diferente. Logra sostener un buen ritmo y tensión hasta el final, donde incluso en el mismo deja más preguntas que respuestas, algo que no se consigue habitualmente. Acá hablamos de una ficción que logra dar continuidad sin fisurarse, e incluso incrementa el nerviosismo.
Lo que parece ser un caso más de asesinato, se convierte en una serie de cuestionamientos sobre distintas verdades poco explicables, planteamientos de aquello irreal que se vuelve tangible, de creencias, posibilidades, de dejar una ventana abierta a nuestra mente, tener en cuenta que tal vez no estamos tan solos como pensamos en este mundo, que convivimos con algo más allá de lo racional con pruebas evidentes que nos obliga a indagar queramos o no.
Un notable thriller policíaco con terror sobrenatural. Con una producción muy bien cuidada en el aspecto visual, donde mantiene una atmósfera asfixiante que te atrapa de principio a fin, y un guion bien elaborado, la serie se convierte en uno de esos relatos en los que en verdad se le hace justicia a una adaptación de Stephen King en la pantalla.
Desde hace mucho tiempo no teníamos una historia con un misterio oculto tan llamativo, de esos que los fans del suspenso no querrán dejar pasar.
Tráiler:
Noelia Giacometto
