26° BAFICI: «O Último Azul» de Gabriel Mascaro (2025)
El director brasilero Gabriel Mascaro nos propone en «O Último Azul» un futuro distópico en donde las personas mayores de 80 años son trasladadas a una colonia donde pasarán sus últimos días llenos de comodidades. En este contexto conoceremos a Tereza, de 77 años que vive en un pequeño pueblo industrializado del Amazonas, que de un día para el otro se entera que redujeron la edad «jubilatoria» y de pronto no solo tendrá que dejar de trabajar, sino también mudarse a este lugar al que no quiere ir y empezar a depender de su hija. Es así como buscará emprender un viaje para cumplir algunos sueños que le quedaron pendiente antes de que sea demasiado tarde.
«O Último Azul» nos ofrece una mirada crítica hacia el trato que se le otorga a los adultos mayores, donde en vez de recompensarlos por toda una vida de esfuerzo y trabajo, la sociedad suele aislarlos y desecharlos por la falta de movilidad y capacidad para resolver algunas cuestiones. A partir de esta parábola, por momentos graciosa por las decisiones ridículas que toma el gobierno y las ocurrencias y viveza de la protagonista para sortear sus obstáculos, se refleja una realidad social preocupante y angustiante.
En este contexto el director construye una película de aventuras que habla sobre las segundas oportunidades y la necesidad de cumplir los sueños antes de que sea demasiado tarde. Lejos de quedarse en el drama, nos muestra la vitalidad de una persona que aún tiene cosas por realizar y que se encuentra en un momento de la vida donde todavía tiene las ganas y las fuerzas para hacerlo.
Denise Weinberg hace un gran trabajo para componer a esta mujer con temperamento y personalidad, que de un momento a otro tiene que adaptar su rutina a una peor posición pero que no se limita a cumplir con las reglas, sino que toma las propias riendas de su vida. En el camino se encontrará con otros personajes interesantes (vemos a un Rodrigo Santoro hablando en portugués, su lengua natal) que la pondrán a prueba y le mostrarán un nuevo camino hacia la libertad.
En síntesis, «O Último Azul» es una parábola tan interesante como divertida, que refleja la realidad sobre los adultos mayores. Aunque en algunas culturas se le da valor a la edad, la trayectoria y las experiencias vividas, en otras se los deja de lado y se los minimiza. Una dura crítica pero que lejos de caer en el drama ven una oportunidad para hablar sobre los sueños pendientes y la vitalidad y ganas que van más allá de un número etario. Buenas interpretaciones, elección de locaciones e ingenio.
«O Último Azul» es una coproducción entre Brasil, Chile, México y Países Bajos, con una duración de 86′. Forma parte de la sección Trayectorias del 26° BAFICI y se puede ver el miércoles 9 de abril a las 16.05 hs en la Sala Lugones del Teatro San Martín, el jueves 10 a las 13.50 hs en el Teatro Alvear y el domingo 13 a las 14.10 hs en el Gaumont.
Puntaje:
Samantha Schuster

