Conferencia de prensa de «Argentina, 1985»
Ayer se estrenó en algunos cines «Argentina, 1985», una de las películas nacionales más esperadas y aclamadas de los últimos tiempos que retrata el juicio a las juntas militares. Dirigida por Santiago Mitre y protagonizada por Ricardo Darín, Peter Lanzani y gran elenco, se realizó una conferencia de prensa con gran parte del equipo para hablar sobre los pormenores del rodaje y contar qué significó para ellos hacer este emotivo y efectivo film.
Santiago Mitre explicó que el proceso de investigación de la película y la escritura del guion fue muy largo y difícil, ya que había muchas cosas que los emocionaba por su valor cívico y la dureza de lo que se contó en el juicio. «Seleccionamos el testimonio de Adriana Calvo de Laborde, que creo que tiene un poder enorme por la manera en la que ella se plantó frente a los jueces a hablar y por la contundencia con la que lo hizo. Fue, por otro lado, el primer testimonio de una sobreviviente de un campo de concentración en el juicio», remarcó el director.
«Luego había otros testimonios que nos parecían importantes por diferentes motivos: la lucha de los estudiantes secundarios, la denuncia de las violaciones que sucedían en los campos de concentración. Por supuesto hay muchos que quedaron afuera porque es una película. Nosotros queríamos retratar esa dureza, valentía y emotividad con la que hablaron los testigos», agregó.
Además, hablaron sobre lo que significa esta película para nuestro país. «Tengas o no referencia de cómo ocurrieron los hechos cuando ocurrieron, el guion de la película se encarga de que uno pueda acompañar paso a paso el relato», comentó Ricardo Darín.
Por su parte, Peter Lanzani aseguró que «esta es una película que le habla a las futuras generaciones. Está bueno poder recordarlo, poder transmitir este tipo de emociones y que se genere ese respeto. La película habla por sí sola».
Al respecto también opinó la actriz Alejandra Flechner: «Yo creo que es una película importantísima en este momento porque sabemos que los juicios a los genocidas fueron un mojón en la historia de este país, algo que marcó una conciencia plena. No solo marcó para el mundo los juicios civiles a militares, como Nüremberg, sino que fue un espejo hacia adentro. Fue muy importante para nuestra sociedad porque no todos sabían lo que estaba sucediendo y eso fue fundamental».
Además agregó que esos «son valores en los que se sigue creyendo: la defensa de los derechos humanos, la no violencia como camino hacia la construcción de una sociedad. Creo que es una gran película que viene a decir y reafirmar muchas cosas que a veces naturalizamos».
Pero también nos contaron su experiencia en el exterior con el film. Darín sostuvo: «Era una gran incógnita que tuvimos todos cuando presentamos la película en Venecia porque la composición de la audiencia era en un 60%, 70% extranjeros. Cuando vimos la devolución a cargo de no solo gente de habla hispana, de argentinos o españoles, sino de gente de otros países, realmente eso fue lo que fogoneó la reacción que tuvimos todos nosotros. Nos dimos cuenta de que esta historia llega a donde quieras».
Asimismo afirmó que las sensaciones que genera el film son comunes a todos los seres humanos. «Es muy difícil encontrar una sociedad que no se haya sentido en algún momento y por el motivo que fuere avasallada, ninguneada, atropellada, deshilachada. Entonces el espíritu de esta película llega a todos lados», sentenció el actor.
Pero a pesar de contar una historia cruda y fuerte, el tono que se eligió para abordarla no fue solamente el dramático, sino también se usó bastante el elemento del humor. Mitre manifestó que «con Mariano Llinás vimos el humor que se podía introducir en la caracterización de Strassera durante los primeros minutos de la película era una forma de desarmar el prejuicio y hacer que el espectador entrase más relajado a la dureza que iba a venir. Además, el mismo equipo de la fiscalía se manejó con humor como una barrera frente al horror que se estaba oyendo en la sala de audiencia».
Con respecto al tratamiento estético y a la puesta en escena para realizar la cinta, el director aseguró que «soy nacido en la década del ‘80, siento que está muy cerca a nuestros tiempos pero cuando empecé a recorrer la ciudad y a confrontarla con el archivo que teníamos me di cuenta de que cambió muchísimo. La reconstrucción fue muy difícil».
«Hubo un trabajo enorme del equipo de arte, del director de fotografía y del equipo de preproducción. Tuvimos un equipazo que se encargó de plasmar eso que teníamos en el papel. Nosotros queríamos que la película estuviese dentro de 1985, no mirarla desde 2022», agregó.
Por último, el productor Axel Kuschevatzky confirmó que la película «no va a estar solo tres semanas en cine, va a estar todo lo que dure en cartel. Luego, igualmente la van a poder ver en la plataforma pero no deja de estar en los cines».
Samantha Schuster