Crítica de «Anatomía de una caída» de Justine Triet (2023)
«Anatomía de una caída» («Anatomy of a Fall») fue la ganadora de La Palma de Oro del Festival de Cine de Cannes de 2023, el galardón más importante del festival francés. El largometraje dirigido por Justine Triet («Sybil», «Victoria y el Sexo») nos brinda un peculiar y muy elocuente thriller francés que se cose a fuego lento y que toca varias aristas a lo largo de sus dos horas y media de duración.
La historia nos presenta a Sandra (Sandra Hüller), una escritora alemana que vive con su marido Samuel (Samuel Theis) y su hijo ciego, Daniel (Milo Machado Graner), en una casa ubicada en medio de los Alpes franceses. Un día Samuel aparece sin vida al pie de la ventana del ático de su hogar y es descubierto por su hijo. Allí comienza una investigación policial para determinar si fue un suicidio o un asesinato. Las circunstancias son misteriosas y Sandra es llevada a juicio para probar su inocencia. El proceso, además de ser complejo y doloroso, pondrá en jaque tanto a Sandra como al pequeño Daniel.
Lo más atractivo de la propuesta de Justine Triet radica en que se presenta como varias películas en una, de forma sólida en todas sus variantes. Arranca con lo que podría ser un whodunnit o thriller policial sobre la investigación de una muerte en circunstancias extrañas, desde el punto de vista de un niño ciego que había salido a pasear a su perro justo cuando se desarrolló el hecho fatídico, para inmediatamente descartar esa posibilidad y pasar a ser un drama judicial de corte clásico. En el juzgado el espectador pasará a ser un testigo más de lo que acontece con más dudas y presunciones que certezas. Finalmente, el relato optará por pasar a contar el costado más duro y amargo que deja este largo proceso con un drama familiar bastante potente donde se ve la tensa relación entre el niño y su madre, que de alguna manera comienza a darse cuenta de algunas cuestiones en el juicio del cual está obligado a formar parte tanto como Sandra.
Cabe destacar el inmenso trabajo de Hüller como la protagonista, al igual que la interpretación de Swann Arlaud como el viejo amigo de Sandra que será su abogado defensor, pero la mención especial y la completa revelación de la película va para el pequeño Milo Machado Graner que compone un papel completamente difícil y desafiante con altura. Probablemente veamos mucho de él durante los próximos años.
«Anatomy of a Fall» es una película atrapante y sumamente atípica en sus formas que seduce por sus mecanismos narrativos, una puesta en escena muy equilibrada y elocuente, así como también por unas actuaciones maravillosas de su elenco. Un relato que se beneficia de la mirada de su joven directora y de cómo aborda temas sensibles con madurez. Emotiva, compleja y también maravillosa.
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Martín Goniondzki