Crítica de “Metegol” de Juan José Campanella (2013)

No hay dudas que uno de los temas que más nos caracterizan a los argentinos es el fútbol. No importa si se sigue a un club en particular o solo a la selección en partidos claves, pero este popular deporte rige nuestras vidas en varias oportunidades.

Y si hablamos de fútbol en el cine argentino, sin dudas tenemos que mencionar a “Metegol» (2013), uno de los proyectos más ambiciosos y efectivos de nuestro país.

Bajo el mando de Juan José Campanella, y con la ayuda de Eduardo Sacheri, Gastón Gorali y Axel Kuschevatzky para la elaboración del guión, la película animada en cuestión se inspiró en el cuento “Memorias de un Wing Derecho” de Roberto Fontanarrosa. La misma cuenta la historia de Amadeo, el “crack» del Metegol, que logra ganarle un partido reñido al chico malo del pueblo. Años después, vuelve este joven convertido en el mejor jugador de fútbol con su mánager para crear el estadio más grande del mundo y quedarse con el pueblo. Pero Amadeo intentará impedirlo junto a la ayuda de las figuras de Metegol que cobran vida.

En primer lugar hay que hablar de lo que está a la vista. La calidad de animación que presenta “Metegol” es impresionante y no tiene nada que envidiarle a las cintas estadounidenses de estudios importantes. Tanto la creación de los personajes (humanos y figuras) como la ambientación de las distintas escenas son de primer nivel.

En cuanto a la historia, si bien nos encontramos con elementos vistos en películas extranjeras, como la más evidente “Toy Story”, Campanella logra darle una impronta distinta y adaptada a nuestra pasión futbolera e idiosincracia. Pero no podemos quedarnos en simplezas y decir que el film es sobre el fútbol, sino que las diversas tramas van mucho más allá del ámbito deportivo. O incluso toma elementos de este ambiente para hablarnos de camaradería, de amistad, de amor, de lealtad, de identidad, de superación de obstáculos, de lucha por nuestros sueños y por lo que más queremos. También realiza una crítica al marketing y a toda la parafernalia que se genera alrededor de una personalidad deportiva, un equipo o un partido.

Con respecto al guión, éste logra llevarnos a transitar por distintas sensaciones. Tenemos emoción, mucho humor, y aventura. Su efectividad también tiene que ver con la gran construcción de sus personajes, sobre todo los jugadores de Metegol, que consiguen conquistar al público con su simpatía, pasión y desconocimiento del mundo exterior pero del buen manejo de lo que sucede en la cancha. Asimismo muestran la esencia de las distintas figuras del mundo deportivo, con sus buenas y malas cualidades y costumbres. Las voces puestas por un muy buen elenco también contribuyen a esta empatía, con personalidades como Fabián Gianola (que interpreta a El Beto, uno de los personajes más divertidos), Miguel Ángel Rodríguez, Pablo Rago, Horacio Fontova, Diego Ramos, Coco Sily, entre otros.

En síntesis, “Metegol” significa una de las mejores propuestas argentinas, debido a que se animó a adentrarse en un territorio dominado por la industria estadounidense, demostrando que su ambición tuvo recompensa. Una gran calidad de animación, acompañada por una divertida y emotiva historia que muestra la esencia de un deporte (y todo lo que conlleva a su alrededor) muy sentido por todos nosotros.

Puntaje: 

Tráiler:

 

Samantha Schuster

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