«I May Destroy You», una serie que te interpela
«I May Destroy You» es una serie británica distribuida por HBO con 12 episodios de media hora, que cuenta la historia de Arabella, una joven que transformó sus tweets en un libro y que ahora está intentando escribir una segunda obra. Para aumentar su inspiración, una noche va a un bar con amigos y, posteriormente, a través de flashes bastantes confusos, se da cuenta de que la drogaron y la violaron. Es así como su vida cambiará, como también la forma de ver su alrededor.
La serie presenta un tono único, nada parecido a algo que hayamos visto previamente en televisión. Además de seguir con la trama central, en cada capítulo se muestra un caso de violación o violencia de una manera bastante particular. Algunas veces se muestra de una forma más directa, otras más sutil, haciéndonos replantear aquellas prácticas o situaciones que podemos tener naturalizadas o vistas en varias oportunidades y que en realidad dan cuenta de una violencia detrás. Muchas de ellas juegan al límite, son ambiguas o confusas.
En cuanto a temas es bastante integral, explora diferentes relaciones y experiencias sexuales, como también el interior de la industria literaria, el costo-beneficio de tener redes sociales, entre otras cuestiones.
A pesar de que los capítulos son de corta duración, algo que fomenta a la maratón, su tema principal y su tratamiento pesado e incómodo hacen que los visualicemos de manera más pausada, decantando todo lo que vamos viendo y reflexionando al respecto. Si bien durante la mayoría del tiempo la serie se mueve dentro de un tono dramático, también tiene momentos de un humor particular. Funciona en ambos extremos y nos permite no desbordarnos con tantas emociones.
La serie está escrita, codirigida y protagonizada por Michaela Coel, quien realiza un gran trabajo actoral, manejando distintos registros y plasmando a la perfección las secuelas de una violación tan confusa como la que vivió y en la cual muchos la hacían ver como culpable. Por momentos intenta seguir con su vida, por otros se da cuenta de que no puede. Y si bien ella es la protagonista indiscutida, se le otorga bastante desarrollo a los personajes secundarios, sobre todo a sus mejores amigos, Terry y Kwame, quienes también transitan por situaciones grises y complejas. Tratan de ser un apoyo para su amiga, al mismo tiempo que tienen que lidiar con sus propias vivencias.
El final de la serie es medio confuso (y por el momento no se planea una continuación), pero, al igual que el libro que está escribiendo la protagonista y que todavía no llegó a su fin, puede tener distintas resoluciones o interpretaciones según quien lo mire.
En síntesis, «I May Destroy You» es una historia poderosa, que puede incomodar a quien lo mire pero de una buena manera. Te interpela, te hace poner en el lugar de los distintos personajes y, sobre todo, te hace reflexionar sobre situaciones cotidianas que dábamos por naturalizadas y que, en realidad, esconden una violencia que desconocíamos. Una muy buena labor de su elenco y un buen equilibrio entre el drama y la comedia, hacen de esta serie una historia necesaria para ver.
Tráiler:
Samantha Schuster
