«Intimidad», el drama de la exposición
La irrupción de la tecnología en nuestras vidas nos permitió estar más comunicados con los demás, achicar distancias y facilitar ciertas cuestiones, pero también en muchos casos significó una invasión a la privacidad y a la libertad individual.
Hace poco se estrenó en Netflix la miniserie española «Intimidad», compuesta por ocho episodios, que trata estos temas a partir de la historia de distintas mujeres que se ven involucradas en casos de exposición. Nos encontramos con una política en ascenso que tiene que lidiar con la filtración de un video sexual; una joven que trabajaba en una fábrica y que no pudo soportar que sus compañeros hayan accedido a fotos y videos íntimos de ella; la investigadora de ambos casos que no termina de asumir su identidad por completo en su vida pública; y una estudiante de secundaria que cortó con su novio y tiene miedo de que su relación aparezca plasmada en las redes. Las vidas de estas mujeres se irán conectando poco a poco en el deseo de buscar justicia y respeto de los demás.
La serie habla sobre el derecho a la intimidad, el machismo, las mujeres que trabajan en lugares liderados por hombres como la política, la policía o una fábrica; las consecuencias de la violación a la intimidad, la violencia de género, la salud mental, la culpabilización a la víctima, entre otros temas, desde un costado dramático y crudo.
A través de historias totalmente diferentes pero relacionadas, «Intimidad» va a abordar la problemática en su totalidad, para mostrar que es algo que repercute en las diversas generaciones y clases sociales. La misma se destaca más cuando se centra en los aspectos más humanos: en la violación a la intimidad y en tratar de entender la gravedad de las consecuencias de dichos actos; cómo puede afectarle de forma distinta a una persona. Cuando la trama se vuelca más al contexto político español pierde un poco de interés.
Los personajes femeninos están muy bien construidos, casi no tenemos presencia de roles masculinos y los que se encuentran se dividen entre meros acompañantes y antagonistas. A pesar de tener un costado vulnerable y estar sufriendo por las distintas situaciones que tienen que atravesar, todas buscan hacer justicia, conocer la verdad y hacerse un lugar en un mundo liderado por hombres.
Las interpretaciones del elenco ayudan a plasmar estos personajes fuertes en pantalla. Principalmente se destaca Itziar Ituño («La casa de papel»), pero también Patricia López Arnaiz, Ana Wagener, Verónica Echegui y Yune Nogueiras. Todas se encuentran creíbles en sus distintas facetas y transmiten de buena manera sus fortalezas y debilidades.
Los aspectos técnicos acompañan de buena manera, principalmente las distintas locaciones y la banda sonora que genera los climas propicios de drama o suspenso, según corresponda con la escena.
En síntesis, «Intimidad» es una serie que logra ahondar sobre la problemática de la exposición involuntaria en todas sus formas y colores. Con algunas subtramas más interesantes que otras, sirve para visibilizar un tema que ocurre en todas las generaciones y clases sociales. Gracias a la construcción de buenos personajes femeninos, óptimas interpretaciones y el clima de tensión/suspenso, consigue mantenernos atrapados en todo momento.
Tráiler:
Samantha Schuster
