«The Alienist», una lograda segunda temporada
Un año pasó desde que Laszlo Kreizler (Daniel Brühl), John Moore (Luke Evans) y Sara Howard (Dakota Fanning) resolvieron el caso de un asesino serial que mataba niños de la calle que se prostituían. Muchas cosas cambiaron en este tiempo, ahora Sara dirige su propia agencia de detectives, John pasó de ser ilustrador a periodista del New York Times y está comprometido y Laszlo sigue indagando en la mente humana, al mismo tiempo que lleva adelante su instituto.
El trío protagónico se encuentra trabajando en el caso de Martha Napp, una mujer acusada de haber asesinado a su beba recién nacida, cuando en realidad la madre sospecha de que le robaron a su hija en la clínica en la cual la tuvo. Cuando la hija del embajador español en Estados Unidos también desaparezca, todas las cartas indicarán que se trata de la misma persona y pondrán todos sus recursos para encontrarla.
Basada en el libro homónimo de Caleb Carr, la segunda temporada de «The Alienist» conserva la misma esencia que su antecesora, ofreciéndonos una trama policial enmarcada en un drama de época. La historia que se cuenta mantiene cierta perversión e impacto, cambiando niños pequeños por bebés, para hablar sobre temas como la maternidad, la salud mental, los traumas de la infancia, las relaciones familiares, el rol de la mujer, la prensa sensacionalista, entre otras cuestiones.
El caso en sí es muy interesante y atrapante, tiene varios giros narrativos que nos van llevando por distintos caminos. Tal vez el asesino se revela un poco temprano pero esto no impide que la trama siga teniendo tela para cortar y se brinde más información sobre la persona. Al igual que en la primera temporada, se busca determinar qué le pasó durante su infancia para que se convierta en quien es hoy.
El clima que se mantiene es de suspenso y tensión constante, priorizando mucho las escenas nocturnas y la fotografía oscura que nos harán sobresaltar en algunas oportunidades. Sigue sobresaliendo la construcción de época, con las calles de tierra y la vestimenta particular, mostrándonos la doble cara de la Nueva York de 1897, con sus lujos y sus miserias.
Además del caso policial que se investiga, la serie sigue ahondando en la vida de los distintos protagonistas, ya no anclándose tanto en su pasado sino más en su presente y en los vínculos que mantienen. Principalmente se explora la relación entre John y Sara, que con el compromiso de por medio existe una especie de triángulo amoroso o un obstáculo mayor para poder concretar lo que sienten. Laszlo, por su parte, empieza a experimentar algunas sensaciones con la aparición de un nuevo personaje, que permitirá poner al alienista en una situación distinta a las que lo habíamos visto previamente.
Por otro lado, si bien Sara había conseguido su lugar dentro de la historia, en esta temporada consigue tener un peso mayor, donde no solo logra desplegar su talento como detective y observadora, sino también para combatir ciertos prejuicios con respecto al rol de la mujer y a cómo debía comportarse. A ella no se la ve como el prototipo de mujer de la época y es muy interesante ver cómo se desenvuelve en este mundo. El hecho de que en esta oportunidad se aborden temas como la maternidad y el rol de la mujer, hacen también que sea muy atinado haberle dado un espacio más importante al personaje de Dakota Fanning.
El resto de los personajes también se encuentran muy bien, con algunos antagonistas que buscarán servir de obstáculos y traicionarán la buena voluntad de los protagonistas, mientras que se pone en peligro a varios de ellos. Esto acrecienta la sensación de tensión y permite que la historia se vuelva más realista por los riesgos que corre.
En síntesis, la segunda temporada de «The Alienist» es una propuesta más que lograda, con una historia impactante y perversa, que consigue hablar de temas como la salud mental, la maternidad o el rol de la mujer, a través de un clima de tensión y suspenso, personajes bien desarrollados y un elenco que los lleva a buen puerto.
Tráiler:
Samantha Schuster
