32° MDQ Film Fest: «Marshall» de Reginald Hudlin (2017)

El realizador Reginald Hudlin nos ofrece un drama legal clásico basado en hechos reales. Chadwick Boseman cuelga el traje de Black Panther para interpretar a un héroe que luchó por los derechos civiles de las personas afroamericanas. Este drama histórico presenta los inicios de la carrera del abogado de la NAACP Thurgood Marshall (Boseman), que se convertirá en el primer juez afroamericano de la Corte Suprema de Estados Unidos.

En el Connecticut de 1940, Marshall defiende a un chofer negro (Sterling K. Brown) que es acusado de violar e intentar asesinar a su jefa blanca (Kate Hudson). Para ello contará con la ayuda de Sam Friedman (Josh Gad), un abogado de origen judío cuya especialidad son las reclamaciones de seguros, que termina ayudando a Marshall, ya que este no puede ejercer su trabajo en Connecticut. El juez (James Cromwell) deja que Marshall se una al juicio con Friedman, pero no le permite usar la palabra durante la querella. Es así como ambos deberán trabajar juntos para que Sam pueda ocupar el lugar del abogado de la NAACP y adquiera los conocimientos necesarios para afrontar el desafío.

Nos encontramos ante un drama de fórmula, donde los protagonistas se desenvuelven bien (gran química entre Gad y Boseman), terminando de redondear un relato prolijo y atrapante por estar basado en una historia real. Narrativamente no presenta ningún desafío para el espectador, pero se encuentra construida en base a personajes sólidos y tridimensionales, a pesar de presentar ciertas cuestiones exageradas en la parte antagonista. La dupla se ve enriquecida por sus trasfondos, un abogado que lucha por los derechos de los afroamericanos en una época sumida por la discriminación, y otro especialista en leyes judío que empatiza con la causa de la NAACP por la comprensión que significó sentirse abrumado y discriminado por la situación alrededor de la Segunda Guerra Mundial y el antisemitismo.

A nivel técnico se encuentra bien ejecutada, sin resaltar en ningún aspecto a excepción de la banda sonora que le otorga cierta dosis de personalidad, a través de sus melodías que incluyen blues, soul, hip hop y rap.

«Marshall» es una historia realmente interesante, narrada desde una perspectiva que busca contar una historia atractiva más que obsesionarse con tratar de ser lo más fiel posible a la realidad (un pecado de varias biopics). Un film que se destaca por la interpretación de sus protagonistas y que sale airosa pese a lo trillado de algunos diálogos y al tradicional estilo. Un drama que no ahonda en golpes bajos y que incluso da lugar a momentos de humor sin romper el clima.

«Marshall» forma parte de la sección Autores del 32° Festival Internacional de Cine de Mar del Plata.

Puntaje:

Tráiler:

 

Martín Goniondzki

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