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Crítica de “Aladdín” de Ron Clements y John Musker (1992)

Basada en el cuento popular árabe homónimo de “Las Mil y Una Noches”, “Aladdín”, estrenada en 1992, es la trigésima primera película de Disney, enmarcada en el momento dorado de la compañía. La misma cuenta la historia de Aladdín, un joven que se las rebusca para sobrevivir junto a su mono y amigo Abu. Un día conoce a la princesa Jasmine, que se escapa del palacio frente al hecho de que en tres días debe elegir a un pretendiente para casarse, siguiendo con las reglas reales con las que no está de acuerdo. El se enamora de ella pero solo un príncipe podría casarse con la muchacha. Aladdín descubre una lámpara de un genio que lo ayudará en esta transformación para ganarse el corazón de la joven y salvarla de un destino peor.

“Aladdín” cumple con creces a la hora de entretener a chicos y grandes. Por un lado nos brinda una historia musical de aventuras y de romance, con un tono de comedia muy efectivo, pero que también habla sobre las costumbres de una sociedad, la discriminación, la aceptación de uno mismo, la libertad y la lucha contra las imposiciones sociales, presentada sobre todo en la figura de la princesa, quien se rebela ante las reglas sociales establecidas.

Al ser un musical, las canciones cumplen un rol fundamental a la hora de contar la historia, siendo algunas divertidas y otras más nostálgicas, pero todas tienen un despliegue visual importante, sobre todo en aquellos momentos en los cuales el Genio es protagonista y la magia se hace presente. La banda sonora a cargo de Alan Menken es icónica y recordada muchos años después.

La animación está muy bien realizada, tanto la composición de los personajes (donde destacamos nuevamente al Genio, pero también cómo le dan vida a los animales o a la alfombra mágica, que tan solo con movimientos podemos entender sus intenciones) como también el universo en el cual se desarrolla, imitando los paisajes del mundo real, donde se priorizan los colores fuertes en su fotografía.

Con respecto al elenco de voces nos encontramos con una buena labor de todos ellos, pero quien más se destaca es sin dudas Robin Williams, quien compone uno de los personajes más versátiles de la película, que, a vez, realiza distintas voces más haciendo imitaciones cuando la trama lo requiere. El resto del equipo está integrado por Scott Weinger, Linda Larkin, Jonathan Freeman, Frank Weller, Gilbert Gottfried y Douglas Seale.

En síntesis, “Aladdín” representa una de esas películas de la era dorada de Disney, donde la historia, su música y animación se combinan para otorgarnos un film divertido, emocionante y que sirve para otorgar ciertos mensajes para el público adulto. La composición del genio es uno de los mejores aciertos de la película, como también sus canciones pegadizas y su tono cómico.

Puntaje:

 

 

Tráiler:

 

Samantha Schuster

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