Crítica de «Reparo» de Lucía Van Gelderen (2022)

Los lugares muchas veces nos marcan, nos definen y nos hacen ser quienes somos. Es donde nos sentimos más cómodos o de donde queremos escapar pero que sin dudas conocemos profundamente. Es así como muchas veces son estos sitios los que se convierten en protagonistas de distintas películas, como es el caso de «Reparo», ópera prima de Lucía Van Gelderen, oriunda de Puerto Pirámides, provincia de Chubut, y que toma este especial lugar para contar una historia emotiva y sentida.

«Reparo» se centra en Justina, una joven grafóloga que vuelve al pueblo que la vio crecer, donde dejó un viejo amor que está a punto de casarse, amistades y enemistades, y parte de su familia. Mientras que no sabe bien cómo manejar su presente y futuro, trata de aferrarse al pasado para ver cómo seguir.

La película nos ofrece una historia sobre relaciones y lugares a los que se vuelven cuando se necesita tomar una importante decisión, como también redescubrirse nuevamente frente a la quietud de la rutina. A partir de un guion lleno de ternura y humor, la protagonista busca reflexionar sobre las pasiones, el amor y la familia de una manera real y honesta. 

Florencia Torrente se pone en la piel de la protagonista y compone a una Justina sincera, simpática y entrañable, que va interactuando con distintas personalidades de aquel pueblo que la marcó, para bien o para mal. Dentro del elenco se destacan Luciano Cáceres como ese viejo amor, María Ucedo como su tía que también trae al presente el recuerdo de la madre de Justina; Paula Carruega como su amiga y confidente; Daniel Melingo como un pescador que le da consejos y Ariadna Asturzzi como Vero, la actual novia de su ex, con la que existe cierto recelo y tensiones.

Sin duda debemos destacar la puesta en escena de la película, la cual presenta un paisaje espectacular de Puerto Pirámides, con sus playas desiertas, las ballenas y el inmenso océano, con algunas escenas subacuáticas más que logradas. La ambientación no sirve solamente para crear un marco para la historia, sino que, como decíamos al principio, es un lugar que funciona como un personaje más. Incluso existen muchos paralelismos entre aquel sitio, sus habitantes y los animales con las sensaciones por las que atraviesa la protagonista.

En síntesis, «Reparo» es una pequeña pero emotiva película que nos hace pensar sobre las relaciones y los lugares que nos marcan. Con un gran acierto de la locación, un guion llevadero y sensible y buenas actuaciones, la ópera prima de Van Gelderen es un buen comienzo en su carrera.

Puntaje:

 

 

Tráiler:

 

Samantha Schuster

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