Crítica de «The Blackening» de Tim Story (2022)
Un grupo de amigos afroamericanos alquila una casa por el fin de semana para celebrar Juneteenth, una fiesta nacional que conmemora la abolición de la esclavitud en Estados Unidos. Sin embargo, lo que se suponía que iba a ser un encuentro lleno de alcohol, música y diversión, se termina convirtiendo en una pesadilla cuando un asesino busca eliminarlos uno por uno mediante un juego macabro que propone, «The Blackening», para poner a prueba los conocimientos sobre su identidad y comunidad.
Una sola locación alejada de la civilización. La oscuridad y la noche como principal escenario. Un grupo de amigos con distintas personalidades y problemáticas. Un juego que va dictando quién muere y quién vive y que muestra la verdadera cara del ser humano. «The Blackening» llama la atención desde el comienzo con una propuesta sumamente interesante y atractiva, y si bien cae en algunos lugares comunes de este tipo de historias, logra darle en la tecla con el tono del film: es una mezcla equilibrada entre una sólida comedia negra, con un humor ácido, irreverente e ingenioso, que utiliza mucho de la cultura popular para ofrecer chistes ocurrentes y efectivos; y un slasher de terror lleno de tensión y suspenso que nos mantiene todo el tiempo alerta porque no sabemos qué es lo que puede pasar finalmente.
El humor y el terror conviven en todo momento de una manera armoniosa para realizar una crítica a la sociedad actual. Ahonda en el racismo creciente en los Estados Unidos, como también se burla de las propias reglas del género de terror, donde comúnmente son los afroamericanos los primeros en desaparecer de la historia.
Es una película que no busca ser más de lo que se propone. Tiene un desarrollo bastante sencillo y lineal, donde los personajes deben sobrevivir a cualquier costo y tratar de descubrir quién está detrás de este fin de semana del olvido. El final logra estar a la altura de las circunstancias, sorprendiendo al espectador y dejándolo más que conforme con la justificación de quién lo hizo y por qué.
Si bien en este tipo de films muchas veces los personajes no importan tanto o no tienen demasiado desarrollo, sino más que nada nos interesa ver cómo van a ir desapareciendo uno a uno, «The Blackening» le otorga un trasfondo a cada uno de los protagonistas para lograr cierta empatía con ellos en mayor o menor medida. Incluso se adaptan bien a los tiempos que corren, dándole mayor fortaleza a los roles femeninos sin quedar solamente como las damiselas en apuros.
El elenco está conformado por Antoinette Robertson, Sinqua Walls, Dewayne Perkins, X Mayo, Melvin Gregg, Grace Byers, entre otros, a quienes probablemente no los tenemos vistos de otras películas o series pero que se manejan muy bien en el terreno de la comedia y el terror. Muchos chistes terminan siendo efectivos por la manera en la que ellos los interpretan.
Como decíamos anteriormente también, utiliza los aspectos técnicos al servicio de la narración. Se aprovecha de tener una única locación para generar mayor tensión y opresión en la pantalla, como también la mayoría de las escenas suceden de noche o tienen poca iluminación, para jugar con la baja visibilidad de los personajes y la nuestra.
En síntesis, «The Blackening» es una propuesta más que atractiva que se maneja dentro de la comedia negra y el slasher del terror, entregándonos un buen equilibrio de ambas partes. Un humor más que inteligente e ingenioso y momentos de suspenso y tensión que nos van a mantener atrapados a la pantalla. Pero además del entretenimiento hace una interesante crítica a la situación actual en Estados Unidos, al racismo y al propio género.
Puntaje:
Tráiler:
Samantha Schuster