«El Jardín de Bronce», la búsqueda continúa
En 2017 se estrenó «El Jardín de Bronce» por HBO, serie basada en la novela homónima de Gustavo Malajovich, que se centró en Fabián Danubio (Joaquín Furriel), un arquitecto que sufre la desaparición de su hija y que hace lo imposible para encontrarla.
Si bien la historia central cerró de una buena manera, la serie consiguió una segunda temporada que volvió en el día de ayer a la televisión. Fabián Danubio continúa siendo el protagonista de esta trama, quien por un lado deberá lidiar con el regreso de su hija, diez años después, y todas las problemáticas emocionales que eso conlleva, como también la aparición de una madre cuyo hijo lleva desaparecido seis meses y que quiere que Fabián la ayude a investigar su caso.
La segunda temporada de «El Jardín de Bronce» empieza de una manera poderosa, equilibrando un buen policial con momentos más íntimos y emotivos. El nuevo caso que se presenta resulta ser atractivo, donde tenemos un incendio que ocasionó la muerte de un hombre, barrabrava de Boca, y la desaparición de su hijo. Muchos interrogantes, misterios y una figura conflictiva como la del padre, dan el puntapié inicial para una rica investigación. Mientras que por otro lado siguen abordando la vida personal de Danubio y su relación con su hija, quien no logra adaptarse a la vida real luego de tantos años lejos de su familia. Tranquilamente «El Jardín de Bronce» podría haber sido una serie antológica con distintas historias por temporada, pero es interesante tomar a Fabián como el hilo conductor de ambas tramas y continuar profundizando en sus conflictos internos.
Como sucedió en la primera entrega, el elenco logra llevar la historia a buen puerto, con atinadas actuaciones, en este primer capítulo, de Joaquín Furriel (Danubio), quien trata de acercarse a su hija sin buenos resultados; Maite Lanata (Moira), que no termina de adaptarse a la realidad, y Paola Barrientos como la madre de Martín, el chico desaparecido, que como cualquier madre intenta hacer lo imposible para encontrar a su hijo, plasmando su desesperación y angustia de una buena manera. También nos sorprendemos gratamente por el regreso de Luis Luque, uno de los mejores personajes que tuvo la primera temporada.
Los aspectos técnicos siguen siendo sobresalientes. Ciertos planos poco frecuentes que le presentan otra perspectiva al espectador, una maravillosa fotografía e incorporación de las locaciones como un personaje más. Esta vez será La Boca el barrio central por el cual se moverán los protagonistas.
En síntesis, «El Jardín de Bronce» regresa de la mejor manera a la pantalla de HBO, con una historia renovada que atrapa desde el comienzo, pero que mantiene la emotividad de los personajes que supimos ver en la entrega anterior. Veremos como se terminará resolviendo el caso pero auguramos un buen camino.
Tráiler:
Samantha Schuster
