«Lovecraft Country», una confusa y seductora historia
Hace más de dos meses se estrenó el primer episodio de «Lovecraft Country», una apuesta arriesgada de HBO que mezcla distintos géneros como el drama, el thriller, la ciencia ficción y el terror sobrenatural para ofrecernos un viaje con algunos altibajos pero con un resultado mucho más que satisfactorio. La semana pasada se emitió el último episodio y decidimos hacer un análisis de lo que nos dejó esta serie.
Basada en la novela de Matt Ruff escrita en 2016, «Lovecraft Country» comienza con Atticus Black, un joven veterano de guerra, que vuelve a su ciudad natal para encontrar a su padre que está desaparecido. Es así como emprenderá un viaje junto a su tío George y su amiga Letitia, que se convertirá en una lucha por sobrevivir al racismo de los años ‘50, a los monstruos que parecen salidos de un libro de Lovecraft y a la magia que ronda en aquel lugar.
Sin dudas «Lovecraft Country» fue una experiencia distinta a la mayoría de las series de televisión, por momentos confusa, pero a la vez fascinante que a pesar de no cerrarnos todos los capítulos no podíamos dejar de mirar para ver a dónde nos iba a llevar. Su trama central seguía un hilo narrativo pero algunos episodios también contaban distintas historias particulares, cambiando de tono constantemente. Dentro de ellos destacamos su inicio que logró transmitir la esencia de la serie, mezclando el terror sobrenatural con la discriminación racial, como tambien el capítulo donde se ahonda en el pasado de Tic con una historia de fábula oriental. No suele ser fácil traer un episodio autoconclusivo en la mitad de la temporada y atrapar al público con personajes nuevos sin conexión previa con la historia, pero «Lovecraft Country» consiguió hacerlo sin ningún inconveniente. El viaje al pasado donde los protagonistas se encuentran cara a cara con sus familiares también es uno de los capítulos más logrados.
El elenco estuvo muy bien elegido y cada uno de sus actores consiguió hacer suyo a su papel para mostrarnos personajes fuertes y perseverantes pero con una cuota de vulnerabilidad, haciéndolos sumamente humanos a pesar de las vicisitudes por las que tuvieron que transitar. Jonathan Majors como Tic logra equilibrar esa personalidad dura que forjó por un pasado difícil con un costado más tierno y protector; ese héroe imperfecto que busca sacrificarse por su familia. Jurnee Smollett-Bell como Letitia es todo lo que necesitamos ver en pantalla: una mujer poderosa, valiente, que se enfrenta a cualquier obstáculo por ella y por los demás, y a pesar de haber tenido algunas actitudes cuestionables en su pasado, intenta trascender hacia alguien mejor. Courtney B. Vance como el tío George y Michael Kenneth Williams como Montrose, el padre de Atticus, son dos figuras paternales muy fuertes, que consiguen acompañar a los jóvenes, dar su punto de vista, que no siempre es del todo acertado, y tratar de enmendar algunos errores cometidos. Existen otros personajes secundarios y antagonistas muy interesantes que vienen a presentarse como un contrapunto a estos protagonistas y que generan tensión y un peligro latente.
Los aspectos técnicos acompañaron de forma perfecta a la serie en todo momento. Los efectos especiales alrededor de la magia están muy bien realizados y son creíbles como también lo es la confección de las criaturas, y existe una gran utilización de la fotografía, la ambientación (sobre todo la recreación de época) y la banda sonora para generar los distintos climas por los que transita la historia, ya sea tensión, aventura o terror.
En síntesis, «Lovecraft Country» es una serie intrigante y seductora para ver, que por momentos podemos sentirnos un poco perdidos o confundidos pero vamos a querer saber dónde termina todo. Con algunos altibajos, sus mejores momentos son cuando logra mezclar el terror sobrenatural con el más terrenal, abordando temas como el racismo o la supremacía blanca, para hacernos reflexionar sobre los monstruos reales y los de ficción. La creación de los distintos climas, la composición de los personajes y las actuaciones del elenco, hacen de esta experiencia un viaje más que grato.
Tráiler:
Samantha Schuster