Mike Flanagan: Una promesa del cine de suspenso y terror

Es director y productor de cine estadounidense, reconocido por sus películas de terror «Hush», «Oculus» y «Absentia». Mike Flanagan está actualmente en boca de todos por el estreno de “Doctor Sueño”, la notable secuela de “El resplandor”.

¿Quién es Mike Flanagan? Quien creó, dirigió, produjo, escribió y editó la serie de terror sobrenatural de Netflix «The Haunting of Hill House» (2018), basada en la novela del mismo nombre de Shirley Jackson. Actualmente está desarrollando una segunda temporada independiente, titulada «The Haunting of Bly Manor», que se basará en la novela «The Turn of the Screw» de Henry James .

Debido a que su padre estaba en la Guardia Costera de los Estados Unidos, la familia se mudaba con frecuencia a distintos lugares, entre ellos Salem, que dejó una gran impresión en él. Eso mantendría un interés permanente tanto sobre en los juicios de brujas de Salem como en temas relacionados con historias de fantasmas y de terror, algo que determinó que más adelante se graduara con una licenciatura en medios electrónicos y cine, y una especialización en teatro. Su primera película dirigida después de la graduación fue «Ghosts of Hamilton Street» (2003), filmada en Maryland y contó con actores locales.

Flanagan es muy meticuloso con su trabajo, es un cineasta que busca el crecimiento personal para poder brindarle lo mejor al público: “Cuando se trata de horror, creo firmemente que dos cosas son ciertas: 1) Lo que no se ve es siempre más terrorífico que lo que se ve, y 2) La explicación nunca es tan satisfactoria como la pregunta».

El mal en el mundo existe, lo sabemos, aunque no tenemos la respuesta al por qué. ¿Qué pasaría si las cosas malas que pasan son parte del plan divino de Dios? ¿Qué pasaría si tiene una lección que enseñarnos? Estas son bases fundamentales que ejerce Flanagan al momento de encarar sus producciones, siempre tiene todo pensado, es un gran realizador, conciso, sabe lo que necesita, por lo cual se convierte en un director codiciado por los actores.

Son reducidas las producciones cinematográficas que logran narrar historias congruentes y de peso en el género de terror. Pero las que lo hacen logran que meditemos sobre nuestros miedos, nuestra naturaleza y la oscuridad que hay en nosotros mismos y en el mundo. “Creo que el horror nos permite hacer esto de una manera segura y catártica. El mal no tiene una respuesta, y al menos para mí, al tratar de forzar las respuestas, más falsa se convierte. Esa filosofía ha guiado mi trabajo antes de esto, y lo seguirá haciendo. Esto habla de una dualidad que tenemos. Queremos entender el mal, queremos que sea familiar, identificable y clasificable… pero sabemos que eso no es real. Y así, para algunos espectadores de películas terror, ambos existen a la vez… quieren comprender el mal en la pantalla y a la vez no”.

El cineasta ha demostrado su brillante capacidad para entremezclar el horror psicológico y el drama familiar. Así como lo hizo con «Gerald’s Game», el estadounidense trajo al séptimo arte otra novela de King, en su más reciente producción “Doctor Sueño”. La cinta está protagonizada por Ewan McGregor, quien da vida a un hombre de mediana edad cuyas habilidades mentales le permiten ayudar a los ancianos del asilo donde trabaja a alcanzar una muerte en paz cuando llega el momento (además de contar con la compañía de un gato que predice quién va a morir). En algún punto de la trama establecerá una conexión con Abra Stone, una niña de 12 años que está en peligro de ser consumida por un grupo de seres casi inmortales que buscan alimentarse de su don.

Flanagan se encuentra hoy dentro de las nuevas promesas dentro del género terror y cada uno de los virtuosos filmes se convierte en oro. Acá un repaso de la corta pero ingeniosa filmografía del norteamericano:

Algunas no muy conocidas pero que marcaron su estilo como director: “Makebelieve” (2000), un drama adolescente sobre cuatro amigos que trabajan en una producción teatral de Romeo y Julieta quienes se ven envueltos en una serie de problemas e infidelidades que les obligará a dejar atrás su época adolescente. Luego siguió con «Still Life» (2001), también abarcando el drama adolescente, y «Ghosts of Hamilton Street» (2003), donde un joven escritor comienza a cuestionarse su propia estabilidad mental cuando las personas que lo rodean desaparecen de la noche a la mañana sin dejar rastro. Tres películas que en distinto punto recaen en el terror psicológico y el suspense clásico, marcando la línea que quiere seguir Flanagan.

Pero no fue hasta «Absentia» (2011) donde comenzó a resonar su nombre. El film se hizo de manera independiente, con la ayuda de un crowdfunding (un grupo de personas apoyando económicamente a un proyecto). Cuenta la historia de una mujer que lleva siete años buscando a su esposo, quien desapareció misteriosamente. Va navegando entre el drama familiar y el terror sobrenatural, con un continuo halo de misterio, de suspenso, algo dando vueltas que no osa revelarse en su totalidad. Aquí el realizador imprime su sello al otorgar gran importancia a la herida (Emotional Wound) del personaje. Porque “Absentia” también es una historia muy triste, que habla sobre la pérdida, el verdadero ente al acecho.

En «Oculus» (2013) fue contratado por Relativity Media, quienes le pidieron adaptar como película lo que originalmente era una serie de cortometrajes sobre un espejo embrujado. Hace tiempo que un asesinato dejó huérfanos a dos niños. Las autoridades culparon al hermano, pero la hermana creció creyendo que el verdadero culpable había sido un antiguo espejo maldito. Ahora los hermanos adultos hacen planes para destruir un espejo antiguo y la fuerza malévola que provocó las muertes de sus padres. Con una buena premisa y realización, el argumento es atractivo y se apoya en una dirección de fotografía inquietante a cargo de Michael Fimognari. El efecto de terror y suspense se consigue a través de ese juego de submundos. «Oculus» intenta armar una atmósfera que construye la tensión en el único lugar donde se supone que deberíamos estar seguros: el seno familiar.

«Hush» (Netflix, 2016) fue realizada exclusivamente para la plataforma. Narra la historia de una escritora sordo muda que vive en medio de la nada, donde es acechada por un asesino serial enmascarado. La película no cambia de locación nunca, y aunque aparecen en pantalla hasta 3 personajes más, el 90% del film es sobre la persecución del gato y el ratón. Flanagan se muestra como un realizador consolidado. Un film tenso y angustioso, muy recomendable para ver.

El mismo año se estrenó «Before I Wake» (2016). Allí Cody es un niño huérfano adoptado, cuyos sueños y pesadillas se manifiestan físicamente cuando él duerme. El drama personal de los protagonistas se come la película. Un guion muy bien elaborado, una filmografía de Michael Fimognari excelente y la música extraordinaria del maestro Dannny Elfman. Original y atrapante, con buenos momentos de ciencia ficción, terror, drama y suspenso. Muy recomendable.

Además hizo «Ouija: Origin of Evil» (2016), donde una viuda que trabaja fuera de su casa como un medio espiritual para fingir comunicarse con los espíritus está acompañada de sus dos hijas. Hasta que incorpora una Ouija y tras contactar con un espíritu, este toma posesión de una de sus hijas y se tendrá que enfrentar a sus temores más impensados para poder salvarla. La película está más enfocada en los efectos psicológicos y en la sugestión que en el mismo relato paranormal, así lo expresó el propio director.

Y por último se encuenta «Gerald’s Game» (2017), también para Netflix, una película que se sostiene perfectamente como un artefacto de suspense y horror. Tiene una de las escenas de gore puro más repulsivas que se han visto en la pantalla y es una perfecta adaptación de Stephen King gracias a su modestia y contundencia.

Claramente se puede decir que Mike Flanagan es uno de los cineastas más prometedores que tiene Hollywood entre sus manos. Si hablamos de un director y guionista con sello propio, con un universo de marcado acento intimista, preciso en la ejecución técnica y realmente interesado en los personajes que habitan sus tramas, ese es Mike Flanagan.

Noelia Giacometto

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