«Black Mirror» S06E04: «Mazey Day»
El cuarto capítulo de la sexta temporada de «Black Mirror» se titula «Mazey Day» y se centra en una joven paparazzi que se dedica a sacarle fotos a los famosos a cambio de dinero. Un evento trágico la hace reflexionar sobre sus prácticas y finalmente decide retirarse. Sin embargo, la desaparición de una joven y talentosa actriz, Mazey Day, y la necesidad de juntar dinero para pagar el alquiler y subsistir la llevan a tomar nuevamente su cámara en busca de una historia que no será nada como lo ha imaginado.
Como venimos viendo en la mayoría de los episodios, a excepción del tercero, «Beyond the Sea», esta entrega de «Black Mirror» directamente tomó la decisión de navegar por otros rumbos, dejando bastante atrás la tecnología y la innovación para meterse más de lleno en historias de terror/suspenso que impacten al espectador.
Es así como nos encontramos con «Mazey Day», que no tiene nada de esa esencia característica de la vieja «Black Mirror», sino que a través de una trama oscura busca ahondar sobre la intimidad de la gente famosa, los excesos, el periodismo sensacionalista, la fama, la culpa, entre otras cuestiones. Pero incluso en este terreno tampoco aporta nada demasiado novedoso que no sepamos, aunque sí nos muestra sus consecuencias llevadas al extremo.
A medida que avanza la historia va virando directamente hacia el terror sobrenatural, con un giro narrativo bastante impactante pero también tirado de los pelos. Es como si nuevamente la serie quisiera atrapar y sorprender al espectador a cualquier costo y sin ser demasiado convincente.
Definitivamente si tuviéramos que hacer un ranking entre los mejores y los peores episodios de esta sexta temporada de «Black Mirror», «Mazey Day» se encontraría dentro de los más flojos. No solo no cumple con la premisa original de la serie antológica (como la mayoría de esta entrega), algo que incluso podríamos dejar un poco de lado como nos ocurrió con «Loch Henry», sino que además nos propone una historia bastante floja, con un giro narrativo sorprendente pero no muy justificado ni convincente.
Tráiler:
Samantha Schuster