Crítica de “I do not care if we go down in history as Barbarians” de Radu Jude (2018)
Elegida como la película para representar a Rumanía en los Oscar, “I do not care if we go down in history as Barbarians” vuelve a retomar la implicancia del pueblo rumano durante la Segunda Guerra Mundial ya abordada previamente en el documental del director de 2017 titulado “The Dead Nation”. En esta oportunidad, se centra en la preparación de una representación para conmemorar un nuevo aniversario de la Segunda Guerra Mundial a cargo de una joven dramaturga. La misma quiere mostrar el accionar de los rumanos durante esa época y cómo se convirtieron en el segundo país que más judíos exterminó (380.000).
Desde el principio, la película rompe con las estructuras para mostrarnos una ficción con un registro cuasi documental, donde incluso la protagonista se presenta como un personaje más del film. A partir de entonces la seguiremos en la preparación de la representación, la elección del elenco, el vestuario, las armas y los tanques y cómo va recolectando el contenido a través de distintos materiales. Es así como el público general va teniendo un pantallazo sobre los hechos a partir de conversaciones, lecturas de libros, visualización de películas o recorridas de museos y no de una manera más convencional como podría ser material de archivo o entrevistas.
Pero la película no solo se enfoca en la representación en sí, sino que se aborda, no de una forma tan profunda, parte de la vida privada de la directora, sobre todo lo relacionado a vínculos afectivos, para aportar también, de alguna manera, los distintos pensamientos del pueblo rumano.
A lo largo de la película podemos ver como este tema es polémico y controversial dentro de Rumania, a partir de las distintas conversaciones. Sobre todo podemos identificarlo mediante varias discusiones entre la protagonista y un funcionario estatal a cargo del financiamiento de esta representación. Por un lado, nos encontramos con la directora queriendo mostrar las responsabilidades de los rumanos y cómo la mayoría creía que peleaban contra el nazismo cuando en realidad eran aliados, para apelar a la reflexión del pueblo y a concientizar para que esto no se vuelva a repetir. Y por el otro, el funcionario refuta todos sus puntos para tratar de suavizar el contenido. Un debate político y social muy interesante que muestra a dos facciones opuestas.
Por otro lado, durante algunos pasajes del film observamos un gran paralelismo entre el pasado y el presente del pueblo rumano, mostrando una vez más la necesidad de este tipo de obras para que dichos sucesos no vuelvan a repetirse.
En síntesis, “I do not care if we go down in history as Barbarians” es una película muy valiosa, que consigue transmitir los hechos reales de un pueblo de una manera lúdica e incluso cómica que atrapará hasta aquellos que no son tan amantes de las cintas históricas. Un film ficcional con un registro cuasi documental que nos ofrece una mirada crítica y reflexiva de una forma poco convencional y altamente efectiva.
Puntaje:
Trailer:
Samantha Schuster
