«Love Life», una comedia romántica convencional

Una de las primeras series originales de HBO Max luego de su lanzamiento en Estados Unidos fue «Love Life», una comedia romántica antológica que se centra en un protagonista distinto en cada temporada para contar su vida amorosa, desde el primer hasta el último amor. Esta primera entrega sigue a Darby, una joven que trabaja en museos y galerías y que sueña con encontrar al hombre ideal.

«Love Life» es una propuesta ligera y entretenida, que no termina de deslumbrar ni entregarnos algo novedoso, sino que es una comedia romántica de fórmula donde en casi todos los capítulos la protagonista establece un vínculo particular, ya sea duradero o casual, con una persona. Esto permite que la historia se vuelva bastante dinámica y nos muestre los altibajos de una relación, sin profundizar demasiado en el drama o en las consecuencias de una ruptura, sino más bien en el hecho de seguir adelante pese a todo.

A diferencia de otras series sobre relaciones o que analizan la vida de un/a joven que llega a la adultez y quiere encontrar estabilidad en su rutina, la serie puede pecar un poco de anticuada, ya que es bastante clásica y convencional y no se siente tan actual ni diversa. De todas maneras, a través de su tono fresco y divertido logra abordar temas como las relaciones tóxicas, el miedo a la soledad, las adicciones y el seguir adelante sin dejar que la tristeza o la frustración nos tire abajo.

Hay ciertas cuestiones que «Love Life» no deja en claro ni busca hacerlo pero puede resultar un poco confuso para quien la mire, como los tiempos que maneja. Por momentos no sabemos si pasaron días, meses o años en una relación, sino que salta de una situación a otra sin aclararlo demasiado.

La narración en off que presenta cada capítulo tampoco termina de encajar del todo en la historia. Por un lado, con un tono de cuentos de hadas, va analizando la situación de la protagonista, que no resulta demasiado necesario porque es algo que podemos ver, y, por el otro, nos brinda un contexto un poco más general sobre las relaciones amorosas, las dificultades de crear una buena conexión y estadísticas sobre, por ejemplo, la duración de las parejas.

Tal vez uno de los puntos más logrados sean sus interpretaciones. Anna Kendrick se luce encarnando a una joven idealista, carismática, insegura y cuyos planes no le salen de acuerdo a los esperado, pero que trata de ver el lado optimista de las distintas situaciones por las que tiene que atravesar. Está bien secundada por un grupo variopinto de personajes, que si bien no todos están demasiado desarrollados, se distinguen por su originalidad y química que tienen con la protagonista.

En estos primeros 10 episodios de media hora de duración, tanto la historia de Derby como la de su entorno cierra de una buena manera. La próxima temporada estará protagonizada por William Jackson Harper (Chidi en «The Good Place») para contar una nueva trama amorosa. Se estima que Kendrick volverá igualmente a ponerse en la piel de su personaje para tener alguna aparición como invitada.

En síntesis, «Love Life» es una serie ligera, entretenida y pasatista, que resulta ser bastante convencional en su planteo y desarrollo. Gracias al carisma y la interpretación de su protagonista podemos empatizar con la historia que nos cuenta e interesarnos por su vida profesional y amorosa. De todas maneras, podría apelar más a la originalidad y a la profundidad para otorgarnos algo más novedoso.

Tráiler:

 

Samantha Schuster

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *