Crítica de «The One I Love» de Charlie McDowell (2014)
Tal vez pensas que es una simple comedia romántica, pero a medida que pasan los minutos te encontrás con una de las película más originales de los últimos años. El título, los actores y el poster te llevan por el camino de decir: es la típica cinta de dos personas que se redescubren. Y lo es, pero de una forma diferente a todas y con mensajes certeros, no superficiales.
Un terapeuta envía a una pareja en crisis a pasar un fin de semana a una estancia para solucionar sus problemas pero situaciones bizarras van a complicar las cosas. No sale como creían. Ni como cree el espectador.
Charlie McDowell está a cargo de la dirección y Justin Lader escribe este interesante guión que crea un suspenso que nos lleva de a poco a un estudio sobre relaciones personales. Desarrolla con buen ritmo un juego inverosímil y algo tramposo, más interesante por lo que plantea que por la historia en sí. Pero funciona, sobre todo gracias al buen trabajo de Mark Duplass y Elisabeth Moss. Realmente hay que destacar la química en pantalla de estos dos grandes actores. Sin su fuerza, la película caería. Moss, la chica que hoy se encarga de protagonizar «The Handmaid’s Tale», nos da una gran actuación: por momentos es encantadora y por otros da una sensación de enigma muy potente.
Trata sobre el hartazgo de la rutina pero también sus beneficios. Las parejas buscan algo que no siempre está al alcance y acá, McDowell nos muestra cómo exploran nuevas emociones y tratan de redescubrir el amor en una situación límite. Todo esto en una fachada de film convencional y que gira a un thriller fantástico. Esta película indie trae una gran trama y varios giros inesperados. Es natural, graciosa y intrigante. Gran recomendación para un domingo a la tarde.
Puntaje:
Tráiler:
Sebastián Manestar