Crítica de «Toc toc toc» de Samuel Bodin (2023)
Podríamos decir que estamos ante la «Bárbaro» (2022) de este año. La ópera prima de Samuel Bodin (director de la miniserie «Marianne») no solo se apoya en un sólido trabajo a nivel guion (escrito por Chris Thomas Devlin, que previamente había escrito el flojo reboot de «La Masacre de Texas» de Netflix) sino que su estilizada puesta en escena favorece a crear un clima bastante intrigante y seductor que atrapa al espectador aun cuando estemos en un terreno que podemos considerar familiar.
Uno ve el tráiler de «Cobweb» (título original de la película) o incluso lee la sinopsis y piensa que esta ante otra película de casas embrujadas que tanto hemos visto en los últimos tiempos con las exitosas sagas de «La Noche del Demonio» o «El Conjuro», solo para nombrar algunos ejemplos. Todas ellas amparadas más que nada en lo que pueden ver los niños que son los principales focos de atención de lo paranormal o incluso los primeros en darse cuenta que algo extraño sucede en sus hogares. En esta oportunidad, tenemos el mismo punto de partida con Peter (Woody Norman), un niño de 8 años que parece vivir atormentado por unos golpes misteriosos que provienen del interior de las paredes de su dormitorio. Sus padres Carol (Lizzy Caplan) y Mark (Antony Starr) rápidamente le dicen al niño que todo proviene de su imaginación. No obstante, tanto el infante como su maestra de escuela, Miss Devine (Cleopatra Coleman), creen que algo realmente maligno está ocurriendo en esa casa y se disponen a tratar de desentrañar el misterio.
Como bien dijimos antes, si bien parece todo dicho y probado previamente, nada es lo que parece y Bodin parece entender a la perfección que a veces menos es más, ya que se limita a presentar pocas locaciones (la casa y el salón de clase de Peter) y un conflicto inicial que es algo trillado, pero que irá mutando a lo largo del largometraje. La puesta de cámara y la elección de los planos es algo primordial que hace funcionar al relato para que no termine siendo una acumulación de jumpscares estereotípicos sino un cuidado ejercicio en función de la narrativa y no del efectismo vacío.
Starr (el Homelander de «The Boys») y Caplan hacen un estupendo trabajo como los padres sobreprotectores que parecen esconder algo, mientras que Norman demuestra nuevamente que es una joven promesa de la actuación. Su expresividad e histrionismo lo convierten en una opción natural para este tipo de roles por eso no es de extrañar que sea la estrella de la semana protagonizando esta película y teniendo un rol importante en otro de los estrenos, «Drácula: Mar de Sangre». Cleopatra Coleman también resulta una elección interesante para el rol de la maestra sustituta que observa que algo le está pasando a su alumno en su hogar.
La segunda mitad del relato tendrá un giro bastante sorprendente que hará que la película avance hacia otro terreno, quizás para algunos pueda sentirse algo tirado de los pelos, sumergiendo al público en un entretenido viaje que desembocará en un tercer acto brutal donde el film cumple con creces lo prometido.
«Toc Toc Toc» podrá no ser la verdad revelada, pero sí se presenta como un correcto film de terror, bien construido e interpretado que entretiene y asusta por igual. Un buen debut para Samuel Bodin que parece entender muy bien el género y sus rincones, sin caer en los lugares comunes con los que amenaza desde el principio. Al igual que en el propio film, las apariencias muchas veces engañan.
Puntaje:
Tráiler:
Martín Goniondzki