Crítica de “Bienvenido a Alemania” de Simon Verhoeven (2016)

El cine suele recrear muchas situaciones de la realidad y abordar temáticas y conflictos que vivimos diariamente. El asunto de los refugiados es uno de los tópicos más candentes en Europa en la actualidad y el director Simon Verhoeven no quedó ajeno a ello en su nuevo film “Bienvenido a Alemania”.

Después de su paso por el Festival de Cine Alemán en nuestro país, ahora llega comercialmente a las salas para introducirnos a la familia Hartmann, compuesta por un padre médico preocupado por su estética, una madre jubilada que busca cómo ocupar su tiempo, una hija que está estudiando una carrera y no está muy segura de que sea su vocación, y un hijo recién separado de su mujer, con su propio primogénito y una obsesión por el trabajo. En este contexto llegará Diallo, un refugiado nigeriano que se instalará con la familia hasta que reciba el veredicto de su asilo permanente en Alemania.

“Bienvenido a Alemania” es una fiel radiografía de lo que está sucediendo en estos momentos en el país, pero también en toda Europa. Debido a los dificultosos conflictos políticos y religiosos que viven distintos pueblos y ciudades de África, se ven obligados a dejar su país para encontrar un presente y futuro mejor en otro lugar. Pero no siempre el nuevo sitio lo recibe con los brazos abiertos: los propios miedos de los lugareños, las barreras del idioma, el racismo, y la falta de oportunidades son algunos de los obstáculos que deberán superar para tener una vida más próspera y segura.

Si bien el film demuestra todos estos aspectos, lo hace de una forma cómica y amena, pero sin sacarle la seriedad correspondiente a la temática. Incluso este recurso impacta de una mayor manera y sirve para exponer las dos caras de una misma moneda, tanto el peligro real como la paranoia, el nacionalismo/racismo y la integración. También existen momentos más reflexivos o emotivos cuando se trata sobre la historia y el contexto del protagonista.

Del mismo modo, el film profundiza acerca de la familia receptora, que se caracteriza por ser disfuncional y tener su propia lucha y transformación interna, que vendrá de la mano de la apertura de corazón y mente.

“Bienvenido a Alemania” no es un film que se centra en retratar las atrocidades vividas por los refugiados, sino que propone una mirada más optimista y positiva del asunto, abogando por una mayor integración y aceptación por parte de los lugareños.

Puntaje:

Tráiler:

 

Samantha Schuster

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *