“Sherlock” terminó su cuarta temporada con un episodio infartante

Por más de que pueda resultar increíble esperar dos años por una nueva temporada de “Sherlock” y que en tres semanas hayamos visto todo lo que podíamos ver, esto es así, ya que con “The Final Problem”, el detective más importante se despidió otra vez de la televisión. (ATENCIÓN: Este artículo contiene spoilers para quienes no están al día con la serie).

La cuarta temporada de “Sherlock” se caracterizó por ser mucho más visceral y humana; se centró más en los personajes que cualquier otra entrega. Si bien tenemos casos circunstanciales, como el asesinato del hijo de un ministro o la aparición del asesino serial Calverton Smith (Toby Jones), todas estas historias están relacionadas finalmente con la vida de los protagonistas. La verdadera identidad de Mary, el conflicto entre Sherlock y Watson, su reconciliación obligada, son algunas de las temáticas que se fueron tratando en los primeros dos episodios.

En “The Lying Detective”, además, se nos reveló que Sherlock y Mycroft tenían una hermana y fue comprobado en este último episodio, que es mucho más oscuro y elaborado que cualquiera que hayamos podido ver.

“The Final Problem” nos presenta la visita de Sherlock, Mycroft y Watson al lugar de residencia (no muy grato) de Eurus, la hermana del medio de los Holmes, cuya existencia fue olvidada por el gran detective. En este episodio no solo tenemos varios casos que Sherlock deberá resolver arriesgado la vida de terceros, sino también nos enteraremos más acerca de su infancia y veremos el regreso del mítico enemigo Moriarty.

Aunque todavía se dude, Moriarty continúa muerto, pero aún en esta condición se las arregló, junto a Eurus, para seguir poniendo a prueba las capacidades de Sherlock de la forma más sádica y perversa posible.

Este episodio en particular se caracteriza por ser muy fuerte. Con algunos giros inesperados, los creadores de “Sherlock” se arriesgaron por realizar un producto que sigue teniendo la esencia de la serie, pero que volvió mucho más oscuro, sensible y emotivo; que va directo al corazón del espectador.

Sin dudas esta cuarta temporada cumplió con todo lo que proponía Steven Moffat desde un comienzo (ser intrigante, dura, emocional y turbulenta) y comprueba una vez más que vale la pena esperar dos años para luego tener un producto de tal calidad.

Esperemos que no haya sido el fin de las aventuras de Sherlock Holmes como se anda especulando y que podamos seguir viviendo muchas más historias junto a su fiel amigo Watson.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *